Los derechos de las audiencias. La sobrerreacción de políticos y medios de comunicación

Magdalena Sofía Paláu Cardona

 

En enero de 2017 los tapatíos fueron testigos de una acción o reacción inusitada por parte del presidente municipal de Guadalajara y del gobernador del estado de Jalisco. Enrique Alfaro y otros alcaldes del área metropolitana de Guadalajara, pertenecientes al partido Movimiento Ciudadano, se pronunciaron públicamente, en una rueda de prensa, en contra de los Lineamientos Generales sobre los Derechos de las Audiencias (LGDA) publicados por el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) en diciembre de 2016.

Por su parte el gobernador, Jorge Aristóteles Sandoval, en su cuenta de twitter publicó una serie de cuatro tuits con el siguiente contenido: “He escuchado atento la inquietud de medios de comunicación locales, así como la postura de alcaldes de ZMG, respecto a lineamientos de IFT ¼” “El respeto pleno a #LibertadDeExpresion debe ser una causa conjunta. Jalisco levanta la mano. Pediré a DipFed @ priJalisco_ revisen tema 2/4” “Podemos, junto con DipFed de otras fracciones, hacer un bloque q abra la discusión y salvaguarde la libertad de medios y comunicadores 3/4” “Mi solidaridad con periodistas. Mi respeto a su labor. Hago eco a sus inquietudes. #Jalisco en conjunto se suma a su causa 4/4”

Tanto las reacciones del gobernador como la rueda de prensa de los alcaldes del área metropolitana de Guadalajara recibieron una amplia cobertura de los medios de comunicación. El Informador, Milenio Jalisco, Notisistema y Canal 44, entre otros, dieron cobertura a la información y dedicaron amplios espacios de opinión al tema, señalando que los lineamientos eran un atentado contra la libertad de expresión y los calificaron como “Ley mordaza”.

Al mismo tiempo que sucedió esto en el estado de Jalisco, en la prensa que se edita en la Ciudad de México y en los canales de televisión que se trasmiten a escala nacional aparecieron voces que hacían los mismos señalamientos; notas y opiniones en contra de los lineamientos emitidos por el IFT, en una aparente campaña en contra.

Es muy poco común que autoridades del estado de Jalisco se pronuncien respecto de políticas públicas o legislación en materia de comunicación. Para entender este hecho se presentan, en este texto, los antecedentes de esos lineamientos, las disposiciones que establece, las posturas de los actores involucrados y una hipótesis de las razones que provocaron la sobrerreacción de algunos agentes de poder en los planos local y federal.

 

Antecedentes

Un primer conjunto de antecedentes que explican la reacción de políticos y medios locales ante la publicación de los Lineamientos Generales sobre los Derechos de las Audiencias se circunscribe a la histórica relación entre medios de comunicación y poder político en nuestro país. Hasta antes de 2007 los aspirantes y candidatos a puestos de elección compraban espacios en prensa, radio y televisión para apuntalar sus campañas políticas. En los años electorales los informes de ingresos por publicidad de las empresas de medios de comunicación reportaban un significativo repunte en sus ganancias. En 2007 se reglamentó este elemento del sistema de comunicación política y se prohibió la compra de espacios en medios electrónicos para hacer promoción política. A esta reforma del marco normativo electoral le siguió una campaña muy amplia de inconformidad promovida por los empresarios de los medios de comunicación.

El segundo conjunto de antecedentes está directamente relacionado con el marco normativo en materia de comunicación que se ha construido en el último lustro en México. En junio de 2013 se publicaron las modificaciones a algunos artículos de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos relativos a las telecomunicaciones y la radiodifusión. Estas modificaciones se conocen comúnmente como la Reforma en Telecomunicaciones que se derivó, junto a otras reformas estructurales, del Pacto por México.[1]

La reforma constitucional en materia de telecomunicaciones y radiodifusión estableció, entre otras cosas, la creación del Instituto Federal de Telecomunicaciones como órgano autónomo cuyo objeto es “el desarrollo eficiente de la radiodifusión y las telecomunicaciones” (CPEUM, Art. 28). Adicionalmente en el apartado b, numeral vi del artículo 6º constitucional se señala que “La ley establecerá los derechos de los usuarios de telecomunicaciones, de las audiencias, así como los mecanismos para su protección” (CPEUM, Artículo 6º). Es decir que se plantea que habría una ley secundaria en la que se definirían los derechos de las audiencias. Finalmente, en ese mismo artículo pero en el numeral IV se mandata, con toda precisión, que “Se prohíbe la transmisión de publicidad o propaganda presentada como información periodística o noticiosa; se establecerán las condiciones que deben regir los contenidos y la contratación de los servicios para su transmisión al público, incluidas aquellas relativas a la responsabilidad de los concesionarios respecto de la información transmitida por cuenta de terceros, sin afectar la libertad de expresión y de difusión” (CPEUM, Artículo 6º).

Con lo anteriormente expuesto queda claro que la Constitución prevé una ley secundaria que reglamente los derechos de las audiencias y un organismo autónomo que garantice su ejercicio.

Como efecto de la reforma constitucional el 14 de julio de 2014 se promulgó la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión (LFTR). La ley establece, entre otras cosas, los derechos de las audiencias en general, los de las audiencias infantiles y los de las audiencias con discapacidad. Asimismo, ofrece el marco normativo para que los concesionarios de radiodifusión (radio y televisión) elaboren códigos de ética y cuenten con un defensor de audiencias.

En cuanto a los derechos de las audiencias, el artículo 256 de la LFTR en su versión original estipulaba nueve derechos específicos de las audiencias. Dos de los más significativos para entender el caso de la protesta de los alcaldes del AMG son: “que se diferencie con claridad la información noticiosa de la opinión de quien la presenta; que se aporten elementos para distinguir entre la publicidad y el contenido de un programa”. En ese mismo artículo de la ley secundaria se establece: “Los concesionarios de radiodifusión o de televisión o audio restringidos deberán expedir Códigos de Ética con el objeto de proteger los derechos de las audiencias. Los Códigos de Ética se deberán ajustar a los lineamientos que emita el Instituto, los cuales deberán asegurar el cumplimiento de los derechos de información, de expresión y de recepción de contenidos en términos de lo dispuesto en los artículos 6o y 7o de la Constitución” (LFTR, artículo 256).

En cuanto a los defensores de las audiencias, los artículos 259, 260 y 261 reglamentan los elementos centrales de esta figura a la que definen, en el artículo 259, como la “responsable de recibir, documentar, procesar y dar seguimiento a las observaciones, quejas, sugerencias, peticiones o señalamientos de las personas que componen la audiencia”. En ese artículo también se reglamenta lo relativo a los lineamientos y se hace de la siguiente manera: “el Instituto deberá expedir lineamientos de carácter general que establezcan las obligaciones mínimas que tendrán
los defensores de las audiencias para la adecuada protección de sus derechos” (LFTR, artículo 259).

Hasta aquí los antecedentes en términos del marco normativo, que se pueden resumir diciendo que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos mandata la expedición de una ley secundaria en materia de telecomunicaciones y radiodifusión, la conformación del Instituto Federal de Telecomunicaciones como órgano regulador y establece la prohibición expresa de presentar publicidad como información noticiosa. Por su parte la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión especifica los derechos de las audiencias, obliga a los concesionarios a formular códigos de ética y nombrar defensores de audiencias, además de que mandata al IFT a elaborar lineamientos generales para la operación y vigilancia de los derechos de las audiencias y de los defensores de audiencias.

 

Los Lineamientos Generales sobre los Derechos de las Audiencias

En cumplimiento con lo dispuesto en la LFTR que señala que “para la emisión y modificación de reglas, lineamientos o disposiciones administrativas de carácter general, así como en cualquier caso que determine el Pleno, el Instituto deberá realizar consultas públicas bajo los principios de transparencia y participación ciudadana”, el ift acordó someter a consulta pública no vinculante el anteproyecto de Lineamientos Generales sobre los Derechos de las Audiencias. Esta consulta pública permaneció abierta del 14 de junio al 7 de septiembre de 2015. A esa consulta respondieron 65 ciudadanos e instituciones con sugerencias de índole diversa.[2]

Entre septiembre de 2015 y noviembre de 2016 no hubo información respecto de este proceso. Es decir que más de un año después de la consulta pública, el 29 de noviembre de 2016, la Unidad de Medios y Contenidos Audiovisuales del IFT presentó el Informe de consideraciones del IFT sobre la consulta pública, de 451 páginas, en el que compendió temáticamente todas las aportaciones recibidas durante la consulta, colocando cada uno de los artículos y las sugerencias de modificación, adición o comentarios recibidos. En ese documento también se da respuesta puntual a los aportes recibidos en la consulta. Ese mismo día se presentó la versión final de los Lineamientos generales sobre la defensa de las audiencias. El pleno del IFT aprobó los lineamientos que fueron publicados en el Diario Oficial de la Federación el 21 de diciembre de 2016.

Hasta aquí el procedimiento del IFT para establecer los lineamientos con los que se deben garantizar los derechos de las audiencias es claro y conforme a lo señalado por el marco normativo vigente, sin embargo, de inmediato aparece la pregunta ¿qué dicen los lineamientos que generaron tanta molestia? En una síntesis muy apretada se advierte que los LGDA establecen y desglosan los derechos de las audiencias de la radiodifusión abierta y las audiencias de los servicios de audio y televisión restringida; se establecen los criterios y normas para la constitución de la figura de los defensores de las audiencias y se especifican, con mayor o menor precisión, los procedimientos para el cumplimiento de lo dispuesto en la LFTR y en el artículo 6º de la constitución. Desde la perspectiva de Bernardo Masini, por entonces presidente del capítulo Jalisco de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información, “Se trató de un paso inusitado, pues por primera vez en la historia de esta industria cultural se explicitaba lo que los medios electrónicos podían hacer y lo que debían evitar para dar a sus audiencias contenidos de calidad. Entre sus aportaciones más relevantes estaba la obligación de diluir las posibilidades de confusión entre los contenidos informativos, los opinativos y los publicitarios” (Masini, 2017).

Si se revisan las columnas de opinión, los programas de análisis y las notas informativas que se publicaron a partir del 25 de enero de 2017, tanto en el plano local como en el nacional, se encuentran señalamientos puntuales a algunas de las disposiciones propuestas por el IFT. Los concesionarios de radio y televisión agrupados en la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión (CIRT), muchos comentaristas y periodistas, políticos, empresarios y hasta la arquidiócesis de la Ciudad de México se pronunciaron públicamente para descalificar los Lineamientos. Entre las críticas más recurrentes a los lineamientos se establece que coartan la libertad de expresión, que implican censura previa y que el IFT extralimitó sus funciones y atribuciones. Llama la atención la cantidad de pronunciamientos en ese sentido, tanto que parecería una campaña orquestada desde el gobierno con apoyo de los medios de comunicación alineados al poder.

 

Las reacciones a través de procesos ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN)

Tan pronto como el 31 de enero el Jurídico de la Presidencia de la República y un grupo de senadores presentaron, como recurso para frenar los LGDA, controversias constitucionales ante la SCJN.

La controversia constitucional presentada por Humberto Castillejos, consejero jurídico de la Presidencia, señala que ocho artículos de la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión contravienen las disposiciones establecidas en la Constitución. Argumentó que la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión no debió darle facultades al IFT de regular un derecho humano, el derecho de las audiencias, y que cualquier regulación de los derechos de las audiencias debe estar prevista en la ley. Esta argumentación sorprende pues es claro que la Constitución, en el artículo 28, establece al IFT como autoridad competente para establecer los lineamientos y ser el órgano regulador en todo lo que se refiere a telecomunicaciones y radiodifusión. Y es aún más sorprendente si se tiene memoria de cómo fue el proceso de aprobación de la LFTR en 2014, a partir de un documento base elaborado desde Los Pinos.

Por su parte, la controversia presentada por el presidente de la mesa directiva del Senado, Pablo Escudero —del Partido Verde Ecologista de México—, plantea que el IFT invadió la esfera de competencias del Congreso de la Unión para normar los derechos de las audiencias, en virtud de que vulnera los principios pro persona y de interdependencia, indivisibilidad y progresividad de los derechos humanos. Algunos senadores, incluido el priista Arturo Zamora Jiménez, senador por Jalisco, afirmaron públicamente que en uno de los apartados de los lineamientos el ift pretende regular el ejercicio de la función periodística alejándose de la función de regulación técnica a su cargo al establecer una clara limitación al derecho a la libre manifestación de las ideas, y que al emitir esos lineamientos el instituto viola el marco constitucional en dos dimensiones, pues vulnera de manera injustificada la libertad de expresión e invade competencias del Legislativo. También llama la atención esta controversia dado que la LFTR fue aprobada por el Senado en 2014. La postura del senador Zamora devela la idea que algunos tienen de que el papel del IFT es exclusivamente técnico y que no debería tener otro tipo de atribuciones, aunque tanto la Constitución como la LFTR señalan lo contrario.

En respuesta a las controversias constitucionales presentadas tanto por los senadores como por la Presidencia, el 1 de febrero el pleno del IFT acordó, en sesión extraordinaria y con votación dividida, modificar la entrada en vigor de los lineamientos prevista para el 16 de febrero de 2017 y aplazarla hasta el 16 de agosto del mismo año. En un breve comunicado (7/2017) el Instituto sostiene que al emitir los LGDA actuó apegado a la Constitución y a la Ley y argumentó que “no debe existir duda sobre su apego a la Constitución, especialmente por la relevancia y trascendencia que tiene el debido respeto a los derechos humanos que reconoce nuestra Constitución”.

Así, a través de una campaña mediática, dos controversias constitucionales presentadas ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación —admitidas el 2 de febrero de 2017— y un comunicado del Instituto Federal de Telecomunicaciones, los Lineamientos generales sobre los derechos de las audiencias quedaron en suspenso.

Pero el asunto no terminó allí, el tema volvió a cobrar relevancia y notoriedad en los medios de comunicación cuando, en abril de 2017, la Cámara de Diputados modificó los artículos de la LFTR que estaban en controversia. Los diputados no esperaron a una resolución de la Corte y, adelantando los tiempos, aprobaron —con 208 votos a favor, 192 en contra y 9 abstenciones— las modificaciones a los artículos 15, 17, 216, 228, 256, 259, 260, 261, 297 y 311 de la LFTR.

Entre los argumentos que los diputados formularon para sostener la necesidad de modificar los artículos de la LFTR llama la atención la recuperación de múltiples publicaciones en los medios de comunicación en que manifiestan oposición a los LGDA, con lo que los diputados concluyen: “Como hemos visto, hubo un pronunciamiento generalizado y al unísono en contra de los Lineamientos Generales sobre la Defensa de las Audiencias, que se dio desde la pluralidad de los sectores desde la academia, industria, periodistas, públicos”, cuando al revisar la información publicada es claro que las voces disonantes a este reclamo no fueron recogidas en el recuento que hicieron los diputados. Una segunda línea de argumentación parece todavía más sorprendente, pues dicen los diputados “es evidente que existe un gran riesgo para la Libertad de Expresión e información permitir que se establezca un régimen de derechos de las audiencias que imponga restricciones arbitrarias tales como distinguir información de opinión, que haya oportunidad y veracidad de la información, y que ante cualquier incumplimiento se puedan imponer sanciones a los medios de comunicación… que la autoridad puede tener la posibilidad de ordenar la suspensión precautoria de transmisiones”. Esta línea de argumentación deja en evidencia que los diputados buscan defender a los concesionarios por encima de las audiencias mismas.

El siguiente párrafo de la argumentación señala que “si bien ambos son derechos constitucionales (libertad de expresión y derechos de las audiencias), el primero de ellos tiene una mayor relevancia y densidad constitucional, ya que la libertad de expresión es un pilar de la formación de un Estado Democrático, mientras que los derechos de las audiencias son principios de última generación que buscan salvaguardar a las personas que reciben un servicio público (radiodifusión) y que se podrían entender como derechos especializados que se han derivado tanto del derecho a la información como de la libertad de expresión, de ahí que su naturaleza no alcance para rebasar estos” (Cámara de Diputados, 2017). Lo que los diputados no consideran es que los LGDA no coartan la Libertad de Expresión de los concesionarios sino que requieren que expongan con claridad las intenciones publicitarias o de opinión en sus contenidos. Después de su aprobación en la Cámara de Diputados pasaron la minuta con las reformas a la LFTR al Senado para su discusión y aprobación.

El Senado no tomó de inmediato el tema de las reformas a la LFTR ni lo colocó en su agenda sino hasta el jueves 26 de octubre. El contexto de la aprobación de la minuta enviada por la Cámara de Diputados para modificar la LFTR fue la crisis derivada por la destitución del fiscal especializado en delitos electorales, Santiago Nieto. En ese momento la “telebancada” del Senado aprovechó para citar, en menos de 24 horas, a las comisiones de Radio, Televisión y Cinematografía, de Estudios Legislativos y de Comunicaciones para votar en favor de la minuta enviada por los diputados en abril. La minuta aprobada en comisiones pasó al pleno del que estaban ausentes, como medida de protesta por la destitución del fiscal, las bancadas del Partido del Trabajo, Morena y Partido de la Revolución Democrática y algunos senadores del pan. La mayoría de senadores del Partido Revolucionario Institucional, Partido Verde Ecologista de México y algunos senadores de Acción Nacional aprobaron —por 72 votos a favor, 13 en contra y tres abstenciones— las modificaciones a la Ley Federal de Radiodifusión y Telecomunicaciones.

Con las rúbricas de Enrique Peña Nieto, presidente de la República, y Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación, se publicó el 31 de octubre en el Diario Oficial de la Federación el decreto que modifica los artículos de la LFTR. Estas modificaciones entraron en vigor el 1 de noviembre de 2017.

Aunque el tema parecía haber llegado al punto final, en documento fechado el 28 de noviembre de 2017 un grupo de 47 senadores presentaron ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación una acción de inconstitucionalidad para revertir las modificaciones aprobadas el 26 de octubre de ese mismo año. Dos argumentos fundamentaron esta acción, por un lado la violación a los procedimientos parlamentarios, al ser citados con menos de 24 horas de anticipación y sin discusión previa a la sesión en la que se aprobaron las modificaciones a la ley y, de mayor relevancia, la exposición de siete aspectos en los que las modificaciones acotan o eliminan derechos de las audiencias. El proceso de acción de inconstitucionalidad sigue abierto al momento de escribir este artículo.

 

Los elementos centrales de las modificaciones a la LFTR

Con el voto de 88 y la ausencia de 40 senadores y la aprobación del presidente, se borraron de un plumazo las obligaciones de los concesionarios para con las audiencias y se limitó la autoridad del IFT. A continuación un breve listado de los elementos más importantes modificados en la LFTR y que atacan al corazón de los principios propuestos en los Lineamientos Generales de los Derechos de las Audiencias que acordó el Instituto.

• Se elimina la obligación de diferenciar entre los contenidos noticiosos y las opiniones o la publicidad dentro de la programación.

• Los concesionarios designarán libremente al defensor de la audiencia, sin que el Instituto u otra autoridad tengan facultades para intervenir u opinar de manera previa o posterior a ello.

• La actuación del defensor de la audiencia se sujetará, exclusivamente, al Código de Ética del concesionario, y únicamente rendirá cuentas a la audiencia y a las instancias que, en su caso, prevea el propio Código de Ética.

• Se eliminó la facultad del IFT de emitir lineamientos a los que deberían ajustarse los concesionarios de radiodifusión o de televisión o radio.

• El IFT no podrá sancionar a los concesionarios por incumplimientos en relación con contenidos.

Es evidente que el sentido de las modificaciones elimina atribuciones a la autoridad reguladora y las trasfiere a los propios concesionarios, quienes, a partir de estas disposiciones, se autorregularán en todo lo relativo a las audiencias y sus derechos. Dejarán de ser sujetos de sanción y, dicho coloquialmente, andarán “por la libre”. Con estas modificaciones no solo se pierde la posibilidad de que el IFT limite las arbitrariedades de los concesionarios sino que se pierden derechos propios de las audiencias, que en otros países democráticos operan como norma, y se pierde, también, una figura de autoridad que actúe a favor de las audiencias frente a los concesionarios de la radio y la televisión.

 

Los actores de la disputa

El recuento de los acontecimientos sucedidos en el trascurso de 2017 en relación con los derechos de las audiencias son una muestra clara de las relaciones entre actores centrales de los procesos de comunicación política. Algunos de los actores más relevantes son: las empresas de medios de comunicación; funcionarios del poder ejecutivo en los ámbitos federal, estatal y municipal; miembros del poder legislativo federal, es decir, diputados y senadores; el órgano regulador, Instituto Federal de Telecomunicaciones; organizaciones de la sociedad civil y las audiencias mismas. Cada uno de estos, a través de sus acciones, permiten reconocer que hay algún interés que defienden.

Las empresas de medios de comunicación: a través de sus periodistas, conductores y columnistas de opinión, las grandes empresas de comunicación mexicanas descalificaron los LGDA argumentando que coartaban la libertad de expresión. Este argumento no es novedad alguna, si se revisa la historia es una constante que, cada vez que se pretende regular de algún modo a las empresas de comunicación, estas argumentan que son atentados a la libertad de expresión. ¿Por qué las empresas de medios creen que distinguir publicidad o segmentos pagados de elementos noticiosos es un atentado contra la libertad de expresión? ¿No será que más bien están defendiendo un interés económico? Es un secreto a voces que muchos medios de comunicación venden entrevistas o reportajes favorecedores a los políticos. Distinguir con una “p” un segmento, presentado dentro de un noticiario, que es pagado, develaría una práctica cuestionable. Por un lado permite a las audiencias distinguir un contenido informativo de uno publicitario y por otro lado pone en cuestión la credibilidad del medio en términos informativos.

Los funcionarios del poder ejecutivo: reaccionan públicamente y se ponen del lado de las empresas de comunicación al apoyar el argumento de que es un atentado a la libertad de expresión. En su discurso aparentan ponerse a favor de los periodistas, sin embargo, si revisamos los datos históricos, hay una inacción de esos mismos funcionarios ante las agresiones y asesinatos a periodistas, que, como se sabe, son actos que permanecen en la impunidad en 98% de los casos. ¿Acaso las autoridades no son responsables de que se esclarezcan esos crímenes? ¿No será acaso que son estos mismos funcionarios los que compran los espacios favorables en radio y televisión?

Los diputados y senadores: como se señaló líneas arriba, no esperaron a que la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolviera los litigios presentados por el jurídico de la presidencia y los senadores. En su lugar decidieron modificar la LFTR para tachar, de una buena vez, de la norma las atribuciones del IFT y los derechos de las audiencias. El avance en términos de regular a las empresas de comunicación que significó la LFTR aprobada en 2014 se echó para atrás y, una vez más, se deja a la “autorregulación” asuntos tan básicos como nombrar un defensor de audiencias y establecer un código de ética, publicarlo y registrarlo ante la autoridad reguladora. ¿Será que los diputados no son conscientes de que las empresas de medios son concesionarios y no propietarios del espectro radioeléctrico y por ello deben cumplir con el servicio público y reglas mínimas de actuación en beneficio de las audiencias? ¿Por qué defienden los intereses de una minoría (empresarios) por encima de los intereses de la mayoría (audiencias)?

El Instituto Federal de Telecomunicaciones: la actuación del Instituto también deja mucho que desear. Más allá de aplazar la entrada en vigor de los lineamientos en espera de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolviera las controversias constitucionales presentadas por Presidencia de la República y los senadores, ha permanecido en silencio. ¿Cómo se debe interpretar ese silencio? Las modificaciones a la LFTR implican la pérdida de atribuciones del Instituto y la reducción de sus funciones a las “regulaciones técnicas”, como argumenta el senador Zamora. ¿No es esta una razón suficiente para una acción más decidida por parte del IFT?

Las organizaciones de la sociedad civil: en la etapa inicial de la disputa hubo algunos pronunciamientos a favor de los LGDA por parte de organizaciones como la Asociación Mexicana de Derecho a la Información. Esta misma organización se pronunció públicamente para que el senado no aprobara las modificaciones a la LFTR y exigió al IFT que presentara una controversia constitucional ante la SCJN. Estos pronunciamientos no tuvieron mayor eco o repercusión. Las modificaciones a la Ley entraron en vigor y la discusión sobre los LGDA quedó fuera de la agenda de discusión pública.

 

Reflexiones finales

Quizá uno de los elementos que causa mayor polémica, aunque no haya sido del que más se habló u opinó en los espacios de los medios, es el que obliga a diferenciar el contenido informativo de aquel que es pagado, es decir, propaganda o publicidad inserta en programas tanto noticiosos como de entretenimiento sin advertencia alguna a las audiencias que atienden a esos espacios. Este elemento se fundamenta, como quedó establecido anteriormente, en el artículo 6º constitucional que a la letra dice en su numeral iv: “Se prohíbe la transmisión de publicidad o propaganda presentada como información periodística o noticiosa”.

La sobrerreacción de los políticos y la campaña impulsada desde los medios en contra de los LGDA parece responder más a intereses políticos y económicos que a un genuino interés por defender la libertad de expresión. ¿De qué sirve la libertad de expresión si a través de la defensa de este derecho lo que se busca realmente es engañar a las audiencias y sostener un negocio oculto entre los políticos y las empresas de comunicación?

Es imprescindible leer estos acontecimientos en el contexto político mexicano. El proceso electoral federal en el que se eligen presidente de la República, diputados federales, senadores y, para Jalisco, gobernador del estado, presidentes municipales y regidores de los 125 municipios del estado de Jalisco y diputados locales, se realiza de octubre de 2017 a julio de 2018.

El periodo electoral es, para los partidos políticos y sus candidatos, un momento decisivo en el que la exposición a través de los medios de comunicación opera como una herramienta que permite mejorar su posicionamiento en los resultados de las elecciones. Perder la posibilidad de hacer algún tipo de convenio con las empresas de medios de comunicación para aparecer en noticiarios o algún programa de entretenimiento puede ser visto como una amenaza. Es quizás por ello que la reacción de la clase política en contra de los LGDA no se hizo esperar.

Por su parte los medios de comunicación, quienes consiguen jugosas ganancias a través de la venta de espacios noticiosos para los políticos, tampoco podrían aceptar los lineamientos sin reclamar, pues sería aceptar la pérdida de un gran negocio. Para los medios, no solo la diferenciación entre noticia y propaganda resulta una amenaza, otros elementos de los lgda podrían resultar negativos para su operación cotidiana como un defensor de las audiencias realmente autónomo o la posibilidad de que cualquier persona del público pueda reclamar algo en relación con los contenidos que presentan.

Finalmente, la disputa por los LGDA que se atestiguó durante 2017 sigue su curso, en ella participan mayormente actores de la clase política y empresarios de los medios y queda muy desdibujado el interés real por las audiencias y su posibilidad de ejercer los derechos que están señalados en el artículo 6° de la Constitución.

 

Referencias

Cámara de Diputados, Dictamen–Reforma-lftr–27–Abril–2017 consultado el 4 de enero de 2018, en https://es.scribd.com/document/346655814/Dictamen-Reforma-lftr-27-Abril-2017

Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, consultada el 18 de noviembre de 2017, en http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/1_150917.pdf

Instituto Federal de Telecomunicaciones (2017). Lineamientos generales sobre la defensa de las audiencias. Consultado el 26 de febrero de 2017, en http://www.ift.org.mx/sites/default/files/acuerdo_de_emision_lineamientos_audiencias-pdf_accesible_0.pdf

Instituto Federal de Telecomunicaciones (2017). Comunicado de prensa 7/2017 consultado el 4 de enero de 2018, en http://www.ift.org.mx/sites/default/files/comunicacion-y-medios/comunicados-ift//comunicado7-ift.pdf

Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión, consultado el 21 de noviembre de 2016, en http://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5352323&fecha=14/07/2014

Masini Aguilera, J.B. (2017). Los actores y motivos tras la presentación del Instituto Federal de Telecomunicaciones como un censor de contenidos. En Delinquir sin castigo, la marca del sexenio (Análisis Plural. Primer semestre de 2017, pp.163–173). Guadalajara: ITESO.

Unidad de Medios y Contenidos Audiovisuales (2017). Informe de consideraciones del IFT sobre la consulta pública.

 

[1] El Pacto Por México fue firmado en el Castillo de Chapultepec el 2 de diciembre de 2012. Es decir, al día siguiente de la toma de posesión de Enrique Peña Nieto como presidente de México. Fue firmado por el Ejecutivo federal y los presidentes de los partidos Acción Nacional, Revolucionario Institucional y de la Revolución Democrática. El acuerdo entre las principales fuerzas políticas del país allanó el camino para la aprobación de reformas estructurales en materia energética, fiscal, de educación, de transparencia y de telecomunicaciones, entre otras.

[2] La convocatoria a esta consulta pública, así como los documentos con las aportaciones de instituciones y ciudadanos, los documentos generados por el propio IFT y el documento con los LGDA se pueden consultar en http://www.ift.org.mx/industria/consultas-publicas/consulta-publica-del-anteproyecto-de-lineamientos-generales-sobre-los-derechos-de-las-audiencias

Medios digitales en Guadalajara: la información se abre paso en las redes sociales pero no siempre a manos de periodistas

Iván González Vega

 

La generalización del uso de la Internet en la vida cotidiana es una de las trasformaciones clave para la historia de los medios de comunicación, que desde finales del siglo XX han luchado no solo por adaptarse a las posibilidades tecnológicas de la nueva plataforma sino también a las presiones y alternativas que trajo para sus modelos de negocio y a las nuevas condiciones que propició en la relación con sus usuarios. En México y el área metropolitana de Guadalajara[1] (AMG) el siglo XXI ha sido la época de las trasformaciones, pero también el tiempo en que otros productores de información comenzaron a impulsar productos pensados específicamente para la Internet.

El presente artículo ofrece una revisión somera de los medios de comunicación creados para la Internet y producidos desde el AMG para documentar su crecimiento. Además pretende censar a los medios orientados específicamente a la producción periodística y señalar algunos de sus rasgos más evidentes. Igualmente busca ofrecer un contraste con los datos recogidos por Orozco y Romero (2014), quienes localizaron nueve medios de comunicación en un ejercicio similar, tres años antes. En este nuevo censo fueron localizados 31 medios; sus características particulares obligan a abrir nuevas preguntas.

 

La Internet y sus posibilidades

La red conocida como Internet permite que los medios de comunicación de masas produzcan y distribuyan información con características que en los soportes físicos son muy limitadas o de hecho imposibles: para empezar, interactividad y multidireccionalidad, pues cualquier actor puede producir información en cualquier momento o entrar en contacto con otros participantes del proceso informativo; para seguir, la capacidad de producción multimediática y la distribución multiplataforma de los contenidos, adaptable y ajustable a muy diferentes dispositivos de consumo, y por último, la condición hipertextual de los contenidos, que permite concentrar en los productos digitales información de muy distinto valor y uso.

A partir del siglo XXI las empresas de comunicación han reorganizado sus actividades para llevar sus contenidos a la Internet —bien por razones de mercado, bien por aprovechar las oportunidades de producción que ofrece la red—, lo cual propició trasformaciones que alcanzan a toda su actividad y su estructura organizativa, empresarial y editorial. Pero al mismo tiempo otros particulares y organizaciones han desarrollado medios de comunicación pensados específicamente para la Internet, algunos como grandes organizaciones productoras y distribuidoras de información generalista o de tipo masivo, otros orientados a “nichos” específicos de consumo.

Los medios de este segundo tipo han merecido muy diferentes nombres a lo largo de los más de 20 años de historia de la Internet; “medios digitales” o “medios en línea” son algunos de los más aceptados en la industria.
En cualquier caso, se trata de medios que aprovechan las herramientas digitales y adaptan innovaciones tecnológicas que facilitan sus actividades y permiten la masificación de sus productos, su distribución más eficiente y, particularmente, su producción más barata. Todo esto propicia que no solo las empresas o entes conocidos convencionalmente como “medios” puedan producir contenidos, sino que casi cualquier persona pueda publicar información en la red, sin que necesariamente esté apegada a las convenciones periodísticas (Tirzo, 2016).

Al tiempo, los medios digitales adoptan las estrategias de otros productores de contenidos en la Internet. El que parece más importante es que están estrechamente ligados a sus cuentas de redes sociales, que popularizan sus marcas e identidades y que los obligan a competir con otros productores de información —profesionales o no— por la atención de los usuarios.

Y son también medios de comunicación que han procurado vías de financiamiento alternativas a la publicidad, sin que quede claro si alguna ha tenido éxito, como ocurre con medios estadounidenses como Politico o ProPublica, que obtienen la mayor parte de su financiamiento de donaciones y fondos filantrópicos. La dependencia de la publicidad obliga a que los medios en línea, con independencia de su alcance o popularidad en la red, de hecho compitan aún con los medios convencionales.

 

Características de los medios digitales

Orozco y Romero establecieron en su artículo de 2014 tres criterios para identificar a un medio digital o en línea:

• “Tiene un dominio y renta un espacio en la web. El registro del dominio permite identificar al medio en la red y asociarlo a una persona o a una organización, mientras que la renta de un espacio virtual en un servidor permite al medio alojar y almacenar contenidos en distintos formatos y tamaños”.

• “Publica contenidos multimedia”, es decir, produce contenidos cuyas estructuras narrativas mezclan, combinan o aprovechan de forma indistinta textos, audio, video, imágenes y gráficos, o cuando son adaptables a plataformas diferentes como la radio y la televisión.

• Y, finalmente, “genera espacios para la interacción”, en reconocimiento de que la Internet permite a los usuarios “convertirse en productores y distribuidores de información” y propicia que los medios empleen recursos como chats, foros, suscripciones y actividad en redes sociales.

Este artículo resume un censo que se ajusta a esos criterios de identificación de un medio digital. Sin menoscabo de lo anterior, podrían definirse otros abordajes para distinguir a estos medios; uno de ellos podría responder a las diversas categorías de espacios en la red que difunden información de interés público, como los blogs o bitácoras personales sostenidos por reporteros y comentaristas, o las comunidades virtuales y foros o wikis en donde usuarios de muy diferentes condiciones comparten y discuten información. Sin profundizar en tales diferenciaciones, pero con la intención de reconocer algunas de esas características, este censo considera también los siguientes criterios:

• El medio de comunicación es productor responsable de los contenidos, que abriga bajo la marca que lo distingue. Es decir, sus contenidos informativos son su propiedad o bien de autores a los que comisionó, invitó o autorizó explícitamente.

• Esto descarta a sitios web que agrupan o añaden contenidos de orígenes diferentes, pero también a comunidades construidas principalmente por usuarios, que no garantizan que la información que difundan ha sido verificada con mecanismos periodísticos antes de su publicación.

 

Metodología del censo

Así, la lista de requisitos básicos en este censo para incluir un medio de comunicación es la siguiente:

• Tiene un sitio web con un nombre de dominio propio.

• Difunde información original y, si incluye productos de otras fuentes, los acredita.

• Procede con métodos o criterios periodísticos, como el uso de los géneros tradicionales o la verificación mínima de la información publicada.

• O bien, incluye artículos y columnas en que se privilegia la información de colaboradores propios o externos, siempre y cuando escriban sobre asuntos de interés público.

Los criterios anteriores excluyen blogs personales, pero consienten publicaciones similares a una revista, que publican información de diferentes temas incluyendo asuntos de coyuntura. Se decidió incluir a cualquier medio que mostrara actividad en el mes más reciente, independientemente de cuánto tiempo tuviera operando.

Para construir este censo se registró la información que es localizable a través de sus propios productos y no por vías como entrevistas a su personal; la intención fue recuperar la información que está disponible para cualquier visitante. Todo quedó documentado en una base de datos que está disponible para consulta pública en la liga de libre acceso https://drive.google.com/file/d/1sbaFJX1HWZoSAk6LioKyVPZnd0v7xUUu/view. Los criterios de identificación se pueden consultar en el Anexo de este capítulo.

 

Claves de la búsqueda: un mapa que requiere más herramientas de cartografía

El total de medios localizados en este censo de medios digitales producidos en el Área Metropolitana de Guadalajara es de 31. El método de búsqueda incluyó consultas a periodistas de la ciudad y la revisión de un directorio de medios hecho público: el listado de los registrados a la Feria Internacional del Libro (FIL) en su propio sitio web, y en donde se consignaron cerca de 250 medios. Con base en el registro que cada medio hace al solicitar su inscripción el directorio distingue si se trata de medios con base física en Guadalajara u otras ciudades, y si se trata de medios digitales. La versión 2017 del directorio de la FIL enlista 52 medios digitales del AMG y esta fue la fuente principal de rastreo.

Otra importante fuente de localización de medios fue una serie de búsquedas en la Internet y en las redes sociales Facebook y Twitter, con combinaciones simples de términos como “noticias”, “periodismo”, “medios de comunicación”, “Jalisco” y “Guadalajara”. Este tipo de búsquedas arrojó decenas de resultados, que luego hubo que filtrar para descartar cuentas, perfiles y sitios que son solo replicadores de contenidos. Ese volumen de publicaciones ya ilustra por un lado el interés de los usuarios por buscar información y, por el otro, la facilidad con que pueden utilizarse estas plataformas para generar espacios informativos, independientemente de su calidad o utilidad. Por ejemplo, una búsqueda sencilla en Facebook arroja más de 40 sitios con nombres como Noticias gdl o Jalisco Noticias.

Aunque exceden los objetivos de esta investigación, las comunidades virtuales reveladas con estas búsquedas sencillas deben ser consideradas en posteriores estudios, pues funcionan como espacios de comunicación pública; aun cuando no incluyen el trabajo de mediadores profesionales, como grupos de periodistas, sí atienden temas de importancia cotidiana: desde el trasporte público y la seguridad, hasta servicios públicos, la movilidad urbana más inmediata o la venta e intercambio de productos domésticos.

Otros casos que se consideran son las cuentas y páginas dedicadas a difundir información sobre seguridad pública, publicaciones de nota roja que utilizan recursos como videos y fotografías de cámaras de seguridad para denunciar robos, asaltos y otros delitos; casi como regla general no declaran las fuentes ni la procedencia de tales materiales. En general, se presentan como sitios “de denuncia”. Su puro tamaño ya amerita observación; por ejemplo, Inseguridad_gdl tiene 5,688 seguidores en Twitter y más de 195 mil en la de Facebook GuadalajaraInseguridad. Están también los casos de perfiles como Gdl_Informa (Gdl_informa en Facebook, con más de 98 mil seguidores), que no tiene un reflejo en un sitio web y publica noticias policiacas breves tan solo en el espacio de la fanpage, sin liga a un sitio externo y sin acreditar las fuentes, y del perfil de Twitter Gdl informa (Gdl_informa), distinto del anterior, con más de 21 mil seguidores y que igualmente limita sus noticias al espacio de los tuits con fotografías.

Un listado de cuentas y sitios web que fueron descartados por no cumplir con los criterios para este censo, pero que ameritan atención como espacios informativos, se incluye en una adenda.

 

Descartes

De los nueve sitios encontrados por Orozco y Romero en 2014 solo cuatro siguen vigentes: Artículo Siete, Axópolis, Proyecto Diez y Radio Centinela; he aquí lo registrado al respecto de los cinco restantes:

El Respetable y Conciencia Pública se anuncian como portales de Internet con productos que también circulan de forma impresa, lo cual los margina de este censo. Ambos incluyen ligas a sus versiones impresas.

Periodismo Transversal (periodismotransversal.com) es un dominio vacío. Su página de Facebook (periodismo.transversal) publicó contenidos por última vez en agosto de 2015.

El Lado Bueno (elladobueno.com) aparece como un dominio vacío. Sin embargo, la cuenta de Facebook elladobuenogdl publicó contenidos por última vez en abril de 2017.

Verdebandera.com.mx aparece como un sitio con contenidos, pero el más reciente es del 3 de marzo de 2016. No obstante, la página de Facebook (verdebanderamx) publicó contenidos por última vez aún en septiembre de 2017, si bien eran publicaciones que compartió desde otros sitios. El periodista Sergio Hernández, identificado como propietario, participa en el proyecto Reverso.mx, que sí aparece en este censo; al parecer mudó sus contenidos a aquel nuevo proyecto, que incluye una sección llamada Verdebandera.

 

Los 31 sitios

Con base en las categorías descritas se encontró 31 sitios informativos. En el eje de su tipo de contenido hay una mayoría clara de sitios de “Cultura y entretenimiento” (14), pero en el eje de la actividad principal del sitio la mayoría de los portales son de noticias o periodísticos (20), es decir, sitios en donde se privilegia la información actualizada con frecuencia en forma de noticias o reseñas (véase la tabla 2.1).

Se trata de sitios cuyo año de fundación aparece muy distribuido entre 2010 y 2017, con las excepciones de la revista Replicante (2004) y el blog Marcatextos (2006; véase la tabla 2.2). En cualquier caso, sí parece incrementarse la frecuencia de fundación de medios nuevos conforme avanza el decenio: 10 de los registrados surgieron en los últimos tres años.

En cuanto a la publicidad, apenas 12 de los 31 sitios publican anuncios publicitarios en sus páginas principales y, en siete de los casos, se trata del servicio de anuncios Google Ads, que permite pautar campañas a cambio de anuncios cuyo contenido administra Google, no el dueño del sitio web, como puede apreciarse en la tabla 2.3.

 

Multimedia

La presencia de elementos multimedia es clara, pero no precisamente constante: 18 de los sitios incorporan video y 13 incluyen infografías o ilustraciones (como cartones políticos), pero pocos incluyen audio o animaciones propias. La fotografía es el más común entre los elementos distintos del texto (véase la figura 2.1).

La revisión de estos elementos simplemente consideró que aparecieran en el home o en las noticias más recientes, y no calificó la calidad o confección de estos productos. Así, por ejemplo, no fue posible detectar infografías interactivas —como las que muestran información extra al pasar el puntero del ratón sobre la barra de una gráfica—, útiles en el periodismo de datos para resaltar los destacados.

 

Redes sociales

El componente que sí es de particular dinamismo es el de la presencia de estos medios en redes sociales. Todos los medios localizados están en Facebook, y hay una presencia casi generalizada de cuentas en Twitter y YouTube y una notoria presencia en Instagram; no obstante, la primera de esas redes sociales es por mucho la que concentra a más seguidores por cada caso.

Facebook evidencia, por ejemplo, que Tráficozmg, un medio que comenzó como un servicio para que usuarios de la ciudad compartieran información sobre problemas con la vialidad, creció en pocos años hasta convertirse en auténtico líder del tráfico en la ciudad. Es la única cuenta de Facebook con más de un millón de seguidores y su presencia en Twitter e Instagram es incomparable. El sitio afirma que produce “periodismo ciudadano”; en realidad, la más evidente de su actividad es producir noticias policiacas en video y, desde 2017, un noticiario de video en el que un conductor comenta asuntos diarios; también, por supuesto, tiene una nutrida actividad de sus usuarios. Además, no es un sitio “de nicho” sino que su interés es el público general.

El segundo más presente es la plataforma Conciertos Guadalajara, que ofrece información general para los usuarios de estos espectáculos: además de piezas informativas como reseñas o entrevistas, información para comprar boletos y aprovechar viajes a festivales, o una radio por Internet dedicada al tema. Como tercer líder de Facebook está el sitio de información política y nota roja El Fisgón Político.

En Twitter el mapa es parecido: después de Tráficozmg aparecen Conciertos Guadalajara y uno de los sitios más viejos de la ciudad: Proyecto Diez, dedicado a información generalista, y en Instagram, la tercera red social más popular y a la cual solo están suscritos 20 de los 31 medios, siguen Conciertos Guadalajara, Kä Volta y Cailegdl. En YouTube son dos sitios de política, El Fisgón Político y Polemón, los seguidores de Tráficozmg, pero muy de lejos (véase la tabla 2.4).

La dinámica de las redes sociales se evidencia como una de sus grandes herramientas, dado que permite atraer públicos al movilizar contenidos propios, pero también ajenos, como chistes o videos curiosos. Al mismo tiempo vale la pena observar que algunos medios producen su material multimedia pensando precisamente en las redes sociales. Se encuentran, por ejemplo, publicaciones de Facebook o Twitter basadas en un video o una imagen con valor propio que sirve de enlace a un artículo en el sitio web: el elemento multimedia no necesariamente aparece en la web, pero sirve de “gancho” para atraer al público.

Otros datos son dignos de mención: Tráficozmg es en realidad la bandera de una serie de servicios agrupados en diferentes cuentas de redes sociales, que ofrecen servicios complementarios entre sí, pero además es el único de los medios registrados que ha expandido sus servicios a plataformas como la mensajería WhatsApp o las trasmisiones en vivo de Periscope. Estudios diferentes podrían arrojar más miradas sobre la calidad de los contenidos de cada uno de estos medios: observar el acelerado ritmo de publicaciones de Tráficozmg, El Fisgón Político y Jalisco Rojo, por ejemplo, y contrastarlo con lo que hacen servicios de periodismo dedicado a la política o a la vida ciudadana, como Reverso, Territorio, Okupo Más, Proyecto Diez y Cuarta mx.

Mención aparte merece el alto número de publicaciones dedicadas a asuntos de la cultura y el entretenimiento. Contra revistas de todo tipo de contenidos —como Cailegdl y El Faro Cultural o radios por Internet como Rol gdl— hay publicaciones de nicho que atienden primero a públicos específicos y se abren después a temas “vecinos”: Nine Fiction, por ejemplo, que se dedica principalmente a reseñas de música, incluye también información de videojuegos, y Revista Poua publica artículos de diferentes temas ligados lo mismo a la música popular que a la literatura.

Sin embargo, la medición de seguidores de los 31 medios, cuando se los agrupa en conjuntos por el tipo de información de sus contenidos, arroja otros resultados. Puede verse por ejemplo que los numerosos sitios web de “Cultura y entretenimiento” tienen mucho menos público que los “Generalistas” y puede apreciarse la importancia de los de “Nota Roja” (véase la tabla 2.5). Esta medición está impulsada en buena medida por el impacto de Tráficozmg al cálculo de los medios “Generalistas”.

En Twitter (véase la tabla 2.6) y en Instagram (véase la tabla 2.7), las publicaciones de “Cultura y entretenimiento” remontan mientras las de “Nota roja” pierden terreno, pero las “Generalistas” siguen adelante gracias a la gran comunidad de seguidores de Tráfico zmg.

 

“Engagement”

Los esfuerzos de los medios para atender a sus propias comunidades de usuarios son muy diversos. Como se ha dicho, Tráficozmg combina su esfuerzo informativo con la operación de las redes sociales que son, en el fondo, enormes foros para que los usuarios intercambien información, sobre todo los avisos sobre problemas de vialidad, pero también emergencias como incendios o accidentes. Conciertos Guadalajara atiende a un enorme nicho de usuarios interesados en conciertos, pero sus reseñas y entrevistas cumplen una labor paralela a otros servicios: las noticias breves que son los anuncios de nuevas presentaciones, la difusión de viajes y festivales, el reparto de promociones en forma de regalo de boletos y la operación de extras como un calendario de conciertos y una lista de reproducción de música. Al tiempo, el sitio ofrece a los organizadores de conciertos tarifas para anunciarse.

Para este censo se intentó medir ideas concretas de atención a esas comunidades con el fin de mantener su lealtad, concepto que en inglés se conoce como “engagement”; sin embargo, los datos que se observan en torno a los sitios web son siempre mucho menores que los relativos a las cuentas de redes sociales. Por ejemplo, solo 11 de los 31 sitios ofrecen un servicio de suscripción o registro, como se ve en la tabla 2.8.

También se pudo saber que 26 de los 31 sitios tienen disponible la función de comentarios para los usuarios al final de sus publicaciones, y que Tráfico ZMG es el único que tiene abiertamente un espacio para registrar denuncias o reportes. Ninguno de los sitios opera encuestas en línea.

 

Conclusiones

El crecimiento en número de sitios web y cuentas de redes sociales dedicadas a la información demuestra cómo la Internet ha propiciado el abaratamiento de la producción y distribución de contenidos. Es más barato producir información, aunque no sea original, y distribuirla es muy sencillo gracias a la facilidad de crear un sitio web con dominio propio o utilizar un espacio en las redes sociales digitales.

Los medios de comunicación digitales que operan con uno o más criterios periodísticos clásicos —verificación rigurosa, investigación propia, contraste de fuentes diversas, códigos de ética, etcétera— compiten en presencia: son muchos menos y no necesariamente son los más “populares”. Los 31 detectados en el Área Metropolitana de Guadalajara parecen ofrecer un mínimo de garantías de credibilidad a sus usuarios pero, en cualquier caso, atienden a sus comunidades con esfuerzos profesionales de producción —contenidos propios y originales obtenidos— o de distribución —medios de fácil acceso para el usuario, como la radio en Internet o las activas redes sociales de Tráfico ZMG, por ejemplo.

¿Qué horizonte se dibuja para este ecosistema de medios de comunicación digitales?

• Si bien es difícil elaborar diagnósticos dada la heterogeneidad de contenidos y prácticas en estos espacios, sí es importante subrayar que apenas parece estar en ciernes la explotación de herramientas multimedia o el diseño de estrategias de contacto multidireccional con los usuarios.

No obstante, es clara la tendencia a atender a nichos de usuarios o, mejor dicho, comunidades específicas distinguidas por los servicios que buscan o las prácticas a las que atienden. Las redes sociales evidencian que hay “poco” público para sitios de cultura y entretenimiento dedicados a temas menos “populares” —más para los conciertos de rock y pop, menos para los interesados en literatura, cine o teatro, por ejemplo—, pero el número de sitios operativos subraya el interés en este tipo de espacios.

• ¿Es la Internet un espacio para el periodismo de temas “duros”, como sitios web de información generalista o de opinión y análisis? Dado que esa suposición implica capacidad de los medios digitales para competir con los medios generalistas de la ciudad, la idea se antoja complicada. No obstante, los números de este censo ilustran el interés en esa clase de temas.

• Un estudio más cuidadoso podría revisar también cuáles son las prácticas que los medios proponen a los usuarios para que sean ellos quienes alimenten las agendas informativas, más allá de simplemente administrar las cuentas de redes sociales y de captar cada vez a más usuarios o de ofrecerles “promociones”.

• Es evidente que varios de estos medios comienzan a experimentar con estrategias de trabajo que podrían permitirles una vida más larga y mayor impacto en sus comunidades.

 

Referencias

Directorio de medios registrados FIL 2017 (s.f.). Consultado el 20 de noviembre de 2017, en https://www.fil.com.mx/prensa/directorio.asp

IIEG (2017, 6 de noviembre). Alcanza Área Metropolitana de Guadalajara los 5 millones de habitantes. México. Consultado el 11 de noviembre de 2017, en http://iieg.gob.mx/strategos/alcanza-area-metropolitana-de
-guadalajara-los-5-millones-de-habitantes

Orozco Murillo, R. & Romero Álvarez, F. (2015). Nuevos medios de comunicación en línea de la Zona Metropolitana de Guadalajara. En S. Paláu-Cardona (Coord.), Medios de comunicación y derecho a la información en Jalisco, 2014 (pp. 35–66). Guadalajara: ITESO.

Tirzo, J. (2016, 14 de marzo). El periodismo curador (de contenidos). Revista Mexicana de Comunicación. Consultado el 11 de noviembre de 2017, en http://mexicanadecomunicacion.com.mx/rmc/2016/03/14/el-periodismo-curador-de-contenidos

Torres, A. Medio de comunicación que quiera ser visto en Facebook, deberá pagar. Periódico E–Consulta. Consultado el 20 de noviembre de 2017, en http://www.e-consulta.com/opinion/2017-11-15/medio-de-
comunicacion-que-quiera-ser-visto-en-facebook-
debera-pagar

 

Adenda: sitios web y cuentas de redes sociales no incluidos en el censo

• Los sitios web notizapopan.com, radiotonala.com y radiotesistan.com se anuncian como medios de comunicación para estas localidades del área metropolitana de Guadalajara, pero aparecen como dominios vacíos en la web. En cambio, tienen activas sus cuentas de Twitter (NotiZapopan, RadioTesistan y RadioTonala) y Facebook (RadioRedes News Zapopan, con más de 4,500 seguidores; RadiotesistanNoticias, con más de 14 mil, y NotiTonala, con más de 21 mil), y en las tres puede constatarse que no son solo comunidades de intercambio de información para vecinos, sino también espacios para compartir contenidos de tipo recreativo y denuncias o reportes de interés vecinal. Aunque en las tres cuentas aparece como administrador la misma persona, que se identifica como reportero, no prima el contenido periodístico, dado que muchos de los contenidos son publicaciones de particulares que luego no implican verificación.

• Un caso similar es el de dos sitios cuyos dominios también están vacíos en la Internet: noticiastlajomulco.com, vigente en Facebook como NoticiasTlajomulco (más de 21 mil seguidores) y con cuyo nombre hay una cuenta inactiva en Twitter (TlajoNoticias), y tlajomulconoticias.com, asociado a una cuenta de Twitter (tlajomulconot). El primero comparte principalmente noticias, pero tomadas de otros medios y publicadas con el crédito original; el segundo dice ofrecer “Periodismo ciudadano, reportajes y todo sobre el acontecer noticioso de Tlajomulco de Zúñiga” y publica tuits con ligas a su sitio web que, como se dijo, no es visible; la búsqueda en Google del caché del sitio web no permite localizar los resultados y la búsqueda del dominio en el sitio Who.is solo arroja información sobre un registro privado activo desde 2015.

• La página de Facebook Noticias Guadalajara (Noticiasgdl) tiene más de 30 mil seguidores y ninguna otra plataforma asociada, y se dedica a compartir publicaciones extraídas de otros medios. Una más bautizada Noticias Guadalajara mx (Noticiasguadalajara), también sobre los 30 mil seguidores, se anuncia como una página especializada en información de finanzas, negocios y economía, y comparte principalmente contenidos multimedia del periódico El Economista.

• Los sitios web La Nota es Roja (lanotaesroja.com.mx) y Radarmx (radarmx.com) están asociados por declarar ambos la cuenta de correo electrónico publicidadgdl100@gmail.com y vinculados por su cuenta a perfiles de Facebook como La Nota de Guadalajara (más de 294 mil seguidores). Estos sitios y perfiles difunden información policiaca pero también incluyen columnas sobre política firmadas con seudónimos y noticias acreditadas a agencias. No hay claridad sobre la procedencia de la información, por lo que no fueron considerados en este registro.

• Hay casos de sitios sobre los cuales no hay precisión dado que no se pudo comprobar que publiquen información original. Uno es amplificadorgdl.com, que dejó de publicar en septiembre de 2016. El sitio fue localizado gracias a la página de Facebook Noticias Virales gdl (noticiasviralesgdl), que tiene más de 14 mil seguidores y que comparte principalmente videos de noticiarios de televisión local. La página de Facebook remite al dominio mencionado, en donde hay noticias de interés local y nacional de numerosos temas y fechadas en distintas ciudades, pero todas acreditadas al autor del sitio,
amplificadorgdl; su publicación más antigua es de octubre de 2014. La búsqueda del dominio en Who.is arroja que el registrador GoDaddy hizo privados los datos del propietario. Casos como este simplemente no fueron registrados en el censo.

• En el otro campo más común, el de los sitios web de “Cultura y entretenimiento”, fueron localizados varios casos en que tampoco queda claro que el medio produzca información propia. Es el caso de Revista Clover (revistaclover.com), en el que varios de los contenidos aparecen acreditados como “cortesía” de autores externos.

• La radio por Internet merece una revisión aparte. Hay diferentes servicios de Internet que permiten difundir contenidos con el formato tradicional de la radio. Por no disponer de un sitio web independiente, por ejemplo, se descartó el registro de La Radio del Área, que sin embargo está alojada desde junio de 2012 en la plataforma de podcasts Spreaker (www.spreaker.com/user/laradiodelarea). La Radio del Área produce programas de radio de comentarios y música a temas culturales, y tiene cuentas de Facebook (laradiodelarea) y Twitter (radio_area) con actividad constante. Similar es el caso de Neotardis Radio, que declara un sitio web en la plataforma Blogspot (http://neotardis.blogspot.mx) y tiene 850 seguidores en Facebook (Neotardis), pero subraya su actividad en la plataforma de podcasts iVoox (http://mx.ivoox.com/es/podcast-neotardis-radio_sq_f1175903_1.html).

 

Anexo

 

Criterios para identificar a un medio digital o en línea para elaborar el censo

1. Datos acerca del medio y su identidad en Internet

a. Nombre del medio

Se registra exclusivamente el medio que puede verse en el cabezal del sitio web o en el identificador de la pestaña, o bien el que coincide en las diferentes cuentas del medio.

b. Fecha de consulta

Día de la visita al sitio web y las demás plataformas del medio, y en que se registró la información de la base de datos. Para homogeneizar la información se levantaron los datos del censo entre octubre y el 11 de noviembre de 2017, día en que finalmente se hizo una revisión general.

c. URL

Dirección única del sitio web del medio.

d. Responsable del registro

Nombre del particular o la empresa registradora que muestran los buscadores de registro. Para este censo se utilizaron los sitios Who.is y Whois.net.

e. Registrador

Empresa registradora o propietaria de dominios responsable del sitio web en cuestión.

f. Fecha del registro

La marcada por el mismo servicio propietario de dominio. El dato permite ubicar la “edad” del sitio en internet.

g. Fundador

Nombre del periodista, el propietario o la empresa, si es declarado en la información oficial del medio.

h. Fundación

Año en que el medio comenzó a operar. En este caso se privilegia la búsqueda de la publicación más antigua disponible en el sitio web (por ejemplo, a través del botón de Archivo histórico); sin embargo, en algunos casos se admitió la fecha declarada en plataformas como la página de Facebook del medio.

 

2. Acerca de la identidad y los contenidos del medio

a. Actividad o plataforma principal

Se registra cuál es el principal tipo de publicaciones o contenidos que hace el medio de comunicación. La intención es registrar si se dedica a producir noticias o piezas informativas vinculadas a los géneros periodísticos convencionales o si se trata de productos de otra índole. Esto permite distinguir, por ejemplo, a los medios que son equiparables a estaciones de radio en Internet, de los que se concentran en contenidos informativos, comentarios, opinión o novedades de interés para una comunidad:

• “Portal de noticias y periodístico”, si el contenido principal o más destacado son novedades de índole informativa, reseñas o reportajes y productos de investigación periodística. El sitio Caile gdl, por ejemplo, publica principalmente noticias y avisos sobre actividades culturales en la ciudad.

• “Portal informativo y de otros servicios”, si el medio publica piezas informativas pero además ofrece servicios adicionales a su comunidad. Como Territorio.mx, que en sendas secciones independientes publica información sobre su redacción abierta, opera una escuela y administra una tienda de artículos propios.

• “Artículos, opinión y revistas”, si el medio de comunicación dedica su espacio principalmente a este tipo de contenidos, que privilegia opiniones firmadas en lugar de otros géneros, o si se dirige a públicos específicos, pero con base en la coyuntura. Es el caso de Okupo.mx, aun cuando este sitio comenzó a finales de 2017 a incluir noticias su contenido prioritario son las firmas de sus columnistas colaboradores.

• “Blog o sitio de comentarios”. A diferencia de “columnas de opinión”, identifica medios que difunden información de interés público pero comentada por los propios autores del medio o dueños de la marca.

• “Radio, música y comentarios”. Variable prevista para medios que privilegian piezas o programación sonoras, en lugar de piezas informativas originales como noticias o reportajes.

b. Eslogan del medio

Con la intención de revisar la vocación o línea editorial declarada por el medio.

c. Acceso al sitio

Se esperaba distinguir a medios que tuvieran cualquier mecanismo de paga por sus contenidos; solo se encontraron gratuitos.

d. Actualización

Se pretendió identificar si se trata de medios con publi-
caciones periódicas; cada uno fue tan dispar en sus
frecuencias de publicación, que al final solo se registraron dos posibles respuestas: “Varias veces al día” para nueve de los 30 medios y “Variable” para los 21 restantes, que publican desde algunas veces al mes hasta una vez diaria.

e. Principal tipo de información

Se revisó la prioridad temática del medio de comunicación, con una tipología que finalmente se redujo a nueve variables: “Ciencia y tecnología”, “Cultura y entretenimiento”, “Deportes”, “Economía, finanzas, relaciones públicas”, “Generalista”, “Periodismo de investigación”, “Medio ambiente y ecología”, “Nota roja” y “Política”.

f. Publicidad en el home

Se registró si el medio publica anuncios publicitarios en su página principal, y si se trataba de anuncios de par-
ticulares o de gobierno. Finalmente, el censo registra un tercer tipo, que fue el más común: el servicio Ads Google, que permite a los sitios web generar campañas baratas que dejan ingresos solo con base en las visualizaciones o clics de los usuarios.

 

3. Acerca de los elementos multimedia

a. Audio

Se registra si el medio produce o incluye piezas de sonido en cualquier plataforma, bien como clips o audios cortos, bien como herramientas de reproducción de música, bien como recursos para escuchar emisiones de radio.

b. Fotografía

Se registra si el medio incluye contenidos fotográficos, propios o de colaboradores.

c. Video

Se registra si el medio incluye contenidos audiovisuales como parte de sus piezas informativas, bien como productos propios o bien como clips desde otras plataformas, como videos publicados en YouTube.

d. Gráficos e ilustraciones

Se registra si el medio incluye infografías, dibujos, ilustraciones, diagramas o cartones y tiras cómicas como parte de sus contenidos.

 

4. Acerca de los elementos de seguimiento a los
usuarios

a. Suscripción o registro

Se registra si el medio ofrece canales de suscripción a sus contenidos, como el formato rss, envíos de correo electrónico o un newsletter (boletín electrónico).

b. Encuestas

Se registra si el medio utiliza herramientas de encuesta, sondeo o formularios para recabar opiniones de sus usuarios.

c. Foros y chat

Se registra si el medio incluye esta clase de servicios dentro de su sitio web para recabar opiniones o invitar a la discusión entre usuarios. Ninguno de los 30 medios utiliza tal recurso.

d. Comentarios

Se registra si el medio incluye cualquier servicio para que el usuario publique comentarios a las publicaciones.

e. Denuncia o reporte

Se registra si el medio incluye un buzón o servicio para que el usuario haga reportes directos al medio. Tan solo el sitio Tráfico zmg incluye un servicio de este tipo.

 

5. Acerca de las redes sociales

Se registra si el medio utiliza cuentas de redes sociales y cuál es su número de seguidores al ser registrado. No todos los sitios web declaran qué cuentas y plataformas utilizan, por ejemplo al colocar iconos o ligas que remitan a los usuarios a estas cuentas, así que se realizó una búsqueda simple en cada uno de los siguientes servicios: Facebook, Twitter, Instagram, YouTube, WhatsApp, SnapChat, Tumblr y Periscope. En cada caso se registra el nombre de usuario de la cuenta asociada y el número de seguidores.

 

6. Acerca del personal del medio

Se registra si el medio declara su directorio u organigrama exprofeso dentro del sitio web y, si es el caso, quiénes son los elementos directivos a su cargo. Para efectos de control, se registra además el nombre del primer colaborador o redactor disponible a la fecha de la búsqueda.

 

[1] El AMG está integrada por ocho municipios conurbados: Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque, Tonalá, Tlajomulco de Zúñiga, El Salto, Juanacatlán e Ixtlahuacán de los Membrillos. En 2015 se incluyó al noveno municipio, Zapotlanejo. El 7 de noviembre de 2017, según los cálculos del Instituto Nacional de Estadística y Geográfica, el AMG llegó a cinco millones de habitantes.

Cierra Proceso Jalisco; cambios en la radio local

Sergio René de Dios Corona

 

Aun cuando era de imprescindible lectura semanal para conocer información crítica sobre diversos temas de interés público, Proceso Jalisco cerró sus páginas. A casi 13 años de salir a la luz anunció oficialmente su retiro el 6 de agosto de 2017. En total publicó 666 ediciones. Su desaparición marcó una pérdida para sus lectores y el periodismo local, que en ese periodo encontraron no solamente los trabajos de Proceso nacional sino cientos de reportajes y agudas opiniones acerca de lo que sucede en la entidad.

A Proceso Jalisco lo encabezó el periodista de reconocida y larga trayectoria Felipe Cobián Rosales, único corresponsal que dejó el periódico Excélsior para acompañar a Julio Scherer y a su equipo, tras el golpe contra la cooperativa que se propinó en 1976 desde la Presidencia de la República. Reportero nato, hábil para investigar y entrevistar, Cobián Rosales se incorporó a la revista Proceso desde su fundación. Tras su salida de Proceso Jalisco en noviembre de 2015, más tarde trascendió, en diciembre de 2017, que preparaba un medio digital que se llamaría Partidero, nombre de la columna que escribió durante años en el propio medio informativo.

También en 2017 cerró el impreso gratuito Máspormásgdl, que se distribuía en la zona metropolitana de Guadalajara de lunes a viernes y pertenecía a la empresa Máspormás, que igualmente regala el periódico desde 2009 en la Ciudad de México. El 15 de febrero la versión tapatía publicó su última portada, a casi cuatro meses de cumplir tres años, sin que el medio ofreciera explicaciones públicas en sus páginas acerca de las razones de su salida del mercado. A sus trabajadores solo se les informó que cerraba “por razones económicas”.

Semanas después de que bajó cortinas Máspormásgdl, uno de los periodistas participantes en el impreso, Julio González, abrió el medio digital Okupo Más. Al espacio se sumaron media docena de colaboradores que hasta diciembre de 2017 continuaban compartiendo sus análisis y piezas periodísticas.

Otro medio impreso que dejó de circular fue el semanario Reporte Jalisco. Surgió en marzo de 2016 y para agosto del año siguiente publicó el último ejemplar; es decir, duró año y medio. En marzo de 2017 denunció que un grupo armado interceptó una camionera de la empresa, robó cientos de ejemplares y amenazó a sus distribuidores en Ocotlán.

Casi para concluir 2017, a mediados de diciembre apareció el medio impreso y digital Punto Rojo. Su objetivo es, indica, desarrollar una revista orientada a atender las necesidades de lectura e información cotidiana de un sector de la población activa y participativa, que consume noticias y participa en la toma de decisiones dentro del sector público, privado o académico.

En los casos de Proceso Jalisco y Máspormásgdl, ambos tienen en común que eran las versiones locales de empresas informativas con sede en la Ciudad de México y que decidieron expandirse en Guadalajara; que además de la edición impresa contaban con la digital en web y con cuentas en redes sociales; igualmente que, con sus particularidades, no lograron remontar la crisis económica ni aumentar el número de anunciantes y lectores, a pesar de que su oferta editorial era atractiva para los respectivos círculos de lectores que los siguieron. Otros cambios se registraron en la radio local, especialmente el cierre y mudanza de Milenio Radio y la apertura en Imagen Guadalajara del programa “Imagen Jalisco”.

 

Inicia Proceso Jalisco

El 14 de noviembre de 2004 apareció el primer número de Proceso Jalisco. Se trató de una separata de 16 páginas, que en su portada muestra un cartón del monero Qucho, con el título “Los caprichos del gobernador”. La escena presenta al entonces mandatario estatal panista Francisco Javier Ramírez Acuña en el lugar donde se supone que construirían la presa Arcediano, proyecto que años después se frustró. Ramírez Acuña pregunta: “¿Dices que necesitaríamos muchos viajes para construir la presa?”, a lo que un empleado le contesta: “¡Claro! Pero viajes de cemento, cal y arena”.

En la presentación de Proceso Jalisco se anuncia que a partir de la edición 1463 de Proceso nacional, y en coincidencia con el 28 aniversario de su publicación, ofrecerá un suplemento exclusivo con información sobre el estado, “producto de investigaciones periodísticas objetivas, críticas y sin concesiones”, de acuerdo con la línea editorial que, continúa, ha caracterizado al semanario desde su fundación.

Añade el editorial que asuntos políticos y económicos, acontecimientos sociales, la vida cultural y la actividad deportiva de Jalisco serán materia de trabajo de un grupo de reporteros y colaboradores cuya peculiaridad, además de su calidad intrínseca, es que son precisamente
de Jalisco.

La empresa propone que Proceso Jalisco sea “el punto de partida de una ruta periodística que desde la capital del país, nuestro inevitable origen, nos involucre, nos acerque, aún más, al pulso de la geografía completa del país”.

En ese primer número aparece Rafael Rodríguez Castañeda como director de Proceso Jalisco; Alejandro Caballero, coordinador general, y Felipe Cobián Rosales, coordinador de información. Las oficinas se establecieron originalmente en avenida La Paz, en la colonia Americana de Guadalajara. Desde su aparición Proceso Jalisco marcó claramente su línea editorial crítica a través de las piezas periodísticas que publicó. El primer número abrió con un reportaje de Cobián Rosales titulado “La presa inútil”, en alusión al proyecto de Arcediano, en el río Santiago, y en el que cuestiona al gobernador Ramírez Acuña por seguir empeñado en construir una obra “tan impopular como inconveniente en sus aspectos ambientales, económicos y de salud pública”.

También publicó otra pieza de Cobián Rosales titulada “Giras impunes”, que en el sumario refiere que en los 43 meses de Ramírez Acuña, a la postre secretario de Gobernación durante el sexenio de Felipe Calderón, había visitado cuatro de los cinco continentes “y ante las críticas por su ausentismo y magros logros, dejó en el aire su quinto viaje”. Añade que el mandatario estatal no capta inversiones, pero sí asiste a representaciones de ballet, cenas de gala, exposiciones y seminarios, en periplos cinco estrellas “a cuenta del erario, por supuesto”.

Igualmente, en el primer número se anunció a toda plana procesoradiotv Jalisco con el lema “Escucha los cuentos de alianzas y traiciones en Jalisco”, los lunes, miércoles y viernes a las 7:30 en 1280 de am y el canal 176 de Cablevisión Telefórmula, conducido por María Scherer Ibarra y Álvaro Delgado. Se acompañó el anuncio con la imagen de ambos periodistas.

En su primera edición la revista incluyó textos del periodista Héctor Huerta, del académico Juan Manuel Negrete y el especialista en cultura Javier Ramírez. También apareció la columna de Cobián Rosales llamada “Partidero”. Ahí el periodista aclaró que “Partidero” es el lugar de donde salen por igual el ganado caballar que el vacuno para las carreras o las suertes charras de jineteo, coleadas o pialadas, y es la partida de las escaramuzas en los lienzos. “Es, o puede ser también, la línea de arranque de partidos y políticos que salen a partírsela… o a que se las partan derecho o en escaramuzas”. Ya en broma, lectores y el equipo señalaban que era un partidero “de madres y de políticos”.

Proceso Jalisco originalmente apareció anunciado en la portada de Proceso nacional con una oreja en el margen superior izquierdo que rezaba: “Jalisco. Incluye suplemento”. Posteriormente, en un cambio de diseño que mostraba a la par una modificación editorial de apoyo a la separata, Proceso insertó en la parte inferior de su cabezal de portada la palabra Jalisco, en mayúsculas. Es decir, aparecía ahora visualmente, a través del diseño, totalmente integrado a la publicación semanal.

Desde un principio Proceso Jalisco apareció con su propia portada. También destacó que Cobián Rosales tuvo mención no solo como coordinador informativo del suplemento sino que, además, se le mantuvo en el directorio de Proceso nacional como corresponsal en Jalisco. El primer paso, salir a la calle, estaba dado. Si en el arranque del suplemento los reportajes de la sección “Jalisco Sociedad”, salvo las piezas de cultura y deportes, estuvieron a cargo solo de Cobián Rosales, después se fueron integrando otros periodistas al equipo, tanto reporteros como fotógrafos, sea de planta o como colaboradores. Poco más de tres años después, el 17 de febrero de 2008, por ejemplo, en el número 171, aparecen textos de Alberto Osorio Méndez, Víctor Manuel López Álvaro y Gloria Reza M. Además, en esta edición escogida como las siguientes al azar, como ejemplo, se publican artículos del académico universitario Luis Ignacio Román Morales y del cronista Luis Sandoval Godoy. El cartón es de Qucho, las fotografías son de Refugio Ruiz, Diego Blanco y el archivo de Proceso. En la sección “Jalisco Cultura” continúa Javier Ramírez. El directorio de Proceso Jalisco se amplió. En el número 171 aparecen también los responsables de Edición y Corrección; Corrección tipográfica, Diseño, Fotografía y la Agencia Procesofoto. Al lado del fotoperiodista local, Refugio Ruiz, se le colocó su cargo de “colaborador externo”.

Para el número 368, el 27 de noviembre de 2011, Proceso Jalisco recién había cumplido siete años y anunció su nuevo domicilio, en avenida La Paz 1951-10, entre avenida Chapultepec y Progreso, en Guadalajara, Jalisco. Su portada la dedica al reportaje “El Salto–Ixtlahuacán. La vía de la impunidad”, del reportero Alberto Osorio Méndez, además de piezas de Gloria Reza y Julio Ríos, un artículo de Tomás Domínguez y otro de Juan M. Negrete. Con Refugio Ruiz aparece como “colaborador externo” el fotoperiodista local Rafael del Río.

Otro ejemplo de los trabajos de Proceso Jalisco, al año siguiente, en su número 423 del 16 de diciembre de 2012, su portada ofrece una foto a toda plana del Hospital de Especialidades del Centro Médico del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), de Guadalajara. El título es “Sangría millonaria”. Es un reportaje de Gloria Reza que en el sumario indica: “En materia laboral, la delegación estatal del IMSS no sabe cómo detener las millonarias sangrías que le causan las indemnizaciones por despidos injustificados”. Añade que aun cuando su director jurídico, Víctor Manuel Ávalos Ibarra, intenta minimizar la situación y arguye que 90 por ciento de las querellas las gana la dependencia, “lo cierto es que este año tuvo que desembolsar más de 6 millones en un juicio laboral”.

Aparecen en esa edición trabajos de los reporteros Jorge Covarrubias, Alberto Osorio y Anna G. Lozano, más un artículo de Juan M. Negrete.

A pocos días de cumplir los diez años, el 9 de noviembre de 2014 apareció el número 522 de Proceso Jalisco. La portada la ilustra un cartón de Qucho, con el título “Consintiendo a papá”, con la imagen que personifica a la justicia sentada en el suelo, menesterosa, estirando una mano e implorando “una ayuda para esta pobre ciega”, mientras el presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, Luis Carlos Vega Pámanes, es dibujado pequeño cargando una enorme bolsa que dice “bono vip”, detrás del padre del gobernador Aristóteles Sandoval, el magistrado Leonel Sandoval, vestido como un dandy.

El reportaje de apertura, escrito por Alberto Osorio, era precisamente de ese tema y lo titularon “Poder Judicial. Los bonos de la discordia”, con el sumario que señala: “Para los magistrados todo; para los trabajadores, lo que quede”. Añade que esa es la ley en el Poder Judicial, donde Luis Carlos Vega Pámanes toma las decisiones para tener contentos a sus colaboradores, incluido Leonel Sandoval Figueroa, padre del gobernador Aristóteles Sandoval Díaz. Agrega que el 8 de julio Vega Pámanes anunció que había una partida de 6.5 millones de pesos para repartirlos entre los 33 magistrados, y que preparaba su reelección. Ese número incluye una colaboración del analista Juan José Doñán, una carta del secretario de Salud, Jaime Agustín González Álvarez, para aclarar un reportaje de Proceso Jalisco, y la respuesta de la reportera Gloria Reza. Además de la columna “Partidero”, de Felipe Cobián Rosales, que se publicaba cada semana.

 

El cierre de Proceso Jalisco

El siguiente año, 2015, fue para Proceso Jalisco el comienzo de la debacle. Por un lado, desde las oficinas en la Ciudad de México, de Proceso nacional, se censuró la columna 527 de “Partidero”, de Cobián Rosales. No salió a la luz pública. Tampoco se ofreció a los lectores una explicación de las razones. Se trató del primer indicador visible que anticipó el desenlace. Ese año fue “el principio del fin” de Proceso Jalisco, como titula la revista digital Reverso (reverso.mx) el 7 de septiembre de 2017 un texto del exreportero del semanario impreso, Jorge Covarrubias. El periodista narra que una mañana de octubre de 2015 “Felipe nos comentó uno por uno a los integrantes del equipo que su despedida era inevitable, dando por terminada una trayectoria periodística de más de 40 años, totalmente intachable, incólume y resistente frente a todas las adversidades”. Añade que nunca se enteró de los detalles de la decisión de Cobián Rosales para jubilarse, “pero sin duda le afectó profundamente el retiro de su columna “Partidero”, el espacio editorial en el que vertía su opinión, trascendidos y datos muy específicos que obtenía de primera mano. Ahí, por ejemplo, reveló la clasificación de reporteros cómodos e incómodos que realizó el titular del Cuarto de Guerra del gobierno estatal, Alberto Lamas Flores, para su jefe inmediato, el gobernador Jorge Aristóteles Sandoval”. Covarrubias revela que la columna censurada “cuestionaba la sucesión del líder de la Iglesia de La Luz del Mundo, Samuel Joaquín Flores, quien falleció el 8 de diciembre del 2014”. Otras fuentes de Proceso Jalisco confirmaron esta versión.

La decisión de no publicar la columna “corrió a cargo del coordinador de editores, Alejandro Pérez Utrera, un ejecutivo del que nos quedó la duda si comulgaba con dicha congregación o tenía familiares adeptos a ella, pues algunas veces se comentó que ese había sido el motivo de soberana censura”. Excolaboradores de Proceso Jalisco consultados indican que después de la censura, en respuesta, Cobián Rosales dejó de publicar su columna.

Lo irónico es que un año antes Proceso nacional dedicó una edición especial, la 47, a “Las sectas en México, fe y fanatismo”. Al anunciar en el impreso la venta de ese número señala que Samuel Joaquín Flores, “El siervo de Dios en la tierra” y dirigente religioso de La Luz del Mundo, “adora los lujos, las grandes propiedades y el dinero”.

Covarrubias añade que Cobián Rosales “aguantó el desaguisado, pero a nosotros nos pareció un monumental atropello cometido por la dirección de Proceso a su pluma. Algunos compañeros consideramos que nuestro coordinador de información también se merecía un mejor retiro. Quizá algún homenaje por parte de la empresa en la que estuvo casi 40 años. También la analista de medios María Elena Hernández solicitó a la dirección del semanario un reconocimiento más que sobrado, para quien es el decano de los periodistas en Jalisco”.

No se hizo ningún reconocimiento a Cobián Rosales. El director Rafael Rodríguez Castañeda avaló la censura al no publicar la columna. Proceso nacional había cambiado desde que dejó la dirección Julio Scherer, quien estimaba y valoraba el trabajo de Felipe, anotan experiodistas consultados que laboraban en el impreso. También es importante aclarar, como lo hace Covarrubias, que Felipe Cobián desconfiaba también de los premios y reconocimientos. “Solía decir que el mejor reconocimiento que puede tener un reportero es la publicación de su trabajo como una contribución social. En eso coincidía con el fundador de Proceso, Julio Scherer García, quien tardó once años en recibir el doctorado Honoris causa por parte de la Universidad de Guadalajara, hasta que por insistencia del actual rector, Tonatiuh Bravo Padilla, lo recibió el 28 de noviembre del 2005”.

En su texto Covarrubias anota que el fundador de Proceso nacional aprovechó esa distinción para visitar las oficinas del suplemento que durante sus primeros seis años se localizaron en un edificio de avenida La Paz, junto a la parroquia de Nuestra Señora de la Paz. “Un compañero relata que estando allí, don Julio expresó que esa redacción le recordaba el inicio de Proceso”.

Luego de que se conoció la noticia del retiro de Cobián Rosales, “solo esperábamos la comunicación oficial del director y una mañana en la que estábamos reunidos en la oficina sonó el teléfono”, recuerda Jorge Covarrubias. Se trataba de Rafael Rodríguez, director de Proceso nacional, que dio un mensaje de agradecimiento al titular del suplemento, lo que le pareció al exreportero “algo acartonado y desprovisto de alma, casi como un trámite burocrático”.

En lugar de Cobián Rosales fue nombrada coordinadora de información la reportera Gloria Reza.

 

Intereses internos y externos

Otro elemento que jugó a favor de la desaparición de Proceso Jalisco partió mucho antes desde Proceso nacional. El Consejo de Administración de Comunicación e Información, SA de CV, propietaria del semanario, decidió cerrar el suplemento sin avisarle con anticipación al equipo jalisciense, a pesar de que existía el compromiso de que a este se le daría a conocer previamente, revelan exintegrantes del semanario jalisciense. El Consejo de Administración lo integran Francisco Álvarez Romero, Estela Franco Arroyo, Salvador Corro Ortiz, Rafael Rodríguez Castañeda y Julio Scherer Ibarra. A los dos últimos los unen fuertes lazos de amistad con el dirigente del grupo político que controla la Universidad de Guadalajara (UdeG), Raúl Padilla López.

La UdeG pagaba y paga contraportadas en Proceso nacional, pero durante los más de diez años no metió un solo peso en publicidad a Proceso Jalisco. Para la empresa el ingreso significaba casi 50 mil pesos por número. Antes del cierre del suplemento trascendió que Padilla López estuvo reunido con directivos de Proceso nacional y que eso coincide con inyección de recursos publicitarios para la revista nacional, aducen exreporteros del impreso.

De los cinco números de Proceso Jalisco escogidos al azar para este reporte, en el número 1 no se publicó nada de publicidad; en el 171, de febrero de 2008, tampoco, salvo una plana en que la Agencia de Noticias Apro anuncia que tiene un nuevo servicio para medios de información; igual salió el número 368 de noviembre de 2011, con publicidad solo de Proceso nacional pero sin ningún espacio publicitario externo; el suplemento 423 de diciembre de 2012 salió a la calle sin ninguna publicidad, salvo una plana de Proceso Jalisco que indica “tenemos un lugar para tu anuncio” y con la aseveración de que el suplemento “incrementa tus ventas”; igual situación presentó el número 522, de noviembre de 2014, con cero anuncios y la invitación a publicarlos en la separata. Empresarios, políticos e instituciones de Jalisco nunca respaldaron publicitariamente el suplemento semanal.

Salvo un caso: desde Proceso Jalisco se gestionó la inserción publicitaria de la cooperativa llantera Tradoc, ubicada en el municipio El Salto, producto de una larga y férrea lucha sindical. Sin embargo, el anuncio fue retirado luego de las trabas que halló en las oficinas de Proceso nacional. Exintegrantes de Proceso Jalisco anotan que la relación del suplemento con la UdeG fue tensa, ríspida. Refieren que un reportaje y comentarios críticos de Cobián Rosales hacia la anual Feria Internacional del Libro (FIL) Guadalajara desencadenaron quejas, presiones y amagos que llegaron hasta la Ciudad de México, con repercusiones a la postre.

En ese sentido, Covarrubias confirma que la dirigencia de la Universidad de Guadalajara “tampoco veía con agrado al coordinador de Proceso Jalisco, ni a sus textos, ni a su persona, y eso lo dejó muy en claro en un foro organizado por la casa de estudios, la ONU y la unesco, para celebrar el Día Mundial de la Libertad de Prensa en el 2012”. Agrega que la casa de estudios incluyó como ponente a Felipe Cobián en un panel denominado “Ética, libertad de expresión y periodismo de calidad”, que se celebraría en el Paraninfo Enrique Díaz de León, “pero según recuerdo, nunca le llegó la invitación oficial”. Relata el exreportero del suplemento que el conferenciante magistral de ese panel, el periodista colombiano Darío Restrepo, “acudió a la redacción de Proceso Jalisco y conversó ampliamente con Cobián de distintos temas. Eso pareció convencerlo de asistir al evento”.

Un malestar constante de los periodistas que pasaron por Proceso Jalisco fue que sus piezas eran enviadas a la Ciudad de México para su edición. Los textos retornaban con modificaciones, añadidos, cortes, que en varias ocasiones no coincidían o deformaban editorialmente los originales. Se acomodaban en función de criterios de editores que desconocían el contexto de lo que sucedía en Jalisco, mientras los reporteros del suplemento daban la cara con funcionarios irritados por los materiales publicados, que eran distintos a los que redactaban sus autores originales. Estudiantes de la Licenciatura en Periodismo y Comunicación Pública del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO) padecieron lo anterior. En 2015 entregaron a Proceso Jalisco un reportaje construido en su asignatura Periodismo de Investigación, en el que denunciaban irregularidades en las gasolineras del Área Metropolitana de Guadalajara. El texto que se publicó difería sustancialmente del entregado y se modificó en la Ciudad de México para cuestionar al alcalde de Guadalajara, Enrique Alfaro Ramírez, del Partido Movimiento Ciudadano.

Uno de los señalamientos al suplemento es que parte de sus trabajos criticaban a distintos personajes, instituciones o agrupaciones, sin que en esa misma pieza apareciera la versión del o los señalados. No se les daba derecho de réplica. O bien, a veces hasta un siguiente número se les daba voz o, en ocasiones, aparecía la carta dirigida al semanario con reclamos. El argumento de la vieja escuela periodística que se repetía dentro es que si la investigación estaba bien fundamentada, no había por qué escuchar al interpelado o acusados. Sin embargo, es importante destacar que en Proceso Jalisco se publicaron trabajos de gran valía y que participaron periodistas prestigiados y experimentados, como Esperanza Romero Díaz, quien era colaboradora externa y sustentaba con rigor sus investigaciones, además de las críticas incisivas, irónicas, documentadas, de los diversos articulistas invitados, entre ellos Juan M. Negrete y Juan José Doñán.

 

El adiós de Proceso Jalisco

En el aniversario 11 del suplemento, en diciembre de 2015, se organizó una cena para festejarlo. Esa ocasión acompañó al equipo el director de Proceso nacional. Uno de los reporteros cuestionó durante el convivio a Rafael Rodríguez Castañeda sobre la abrupta salida de Cobián Rosales y “la oficiosa cobertura que Proceso hizo de la FIL”, a la que le faltaba un día para clausurarla. Sin embargo, lo que realmente molestó al director del semanario es que el periodista manifestara abiertamente que la salida de Felipe representaba “el principio del fin” de Proceso Jalisco. Relata Covarrubias que en lugar de admitir que a partir de ese instante el suplemento vivía sus últimos días, “Don Rafael mostró un rostro equiparable al de aquellos políticos que detestan la crítica y los cuestionamientos. Vociferó y rebanó el aire de un manotazo, sin responder apropiadamente. Cuando terminó su reprimenda hubo un silencio sepulcral en la mesa y nadie volvió a inquirir al de México”.

La confirmación oficial de la muerte de Proceso Jalisco vino más de año y medio después, de la pluma y firma del propio Rafael Rodríguez Castañeda. En la edición 2127 del semanario y 665 del suplemento señala que la crisis económica, la baja en el poder adquisitivo y la vorágine de los medios digitales habían puesto en riesgo la supervivencia de los medios impresos en el mundo. Muchos de ellos se han visto obligados a reducir sus plantillas y despedir personal; otros han optado por abandonar el papel y reconvertirse en versión digital; unos más, por desgracia, se han visto obligados a cerrar, añade.

Indica en el texto dirigido a los lectores que la empresa editora del semanario Proceso “no es ajena a esta situación”. Hemos tenido que tomar medidas y realizar ajustes que permitan la continuidad de nuestro medio, explica. “Hoy nos vemos en la dolorosa obligación de comunicarles que una de estas medidas, lamentable pero inevitable, es dejar de publicar el suplemento Proceso Jalisco, que cada semana forma parte adicional de la revista en los ejemplares que son distribuidos en el estado y su zona de influencia”. Anuncia Rodríguez Castañeda que en la edición 2128 del semanario nacional, con fecha 13 de agosto, aparecería por última vez Proceso Jalisco. “Terminará una historia de casi 13 años —habrán sido 666 suplementos—, en que reporteros, fotógrafos, cartonistas, colaboradores y analistas cumplieron puntualmente con la misión periodística que distingue a Proceso desde su fundación: informar con puntualidad, investigar con rigor, denunciar con valentía, no hacer concesiones y ser referente, en este caso, de la vida pública del estado. En suma, ejercer a plenitud la libertad de expresión”. Enseguida, en el epitafio de Proceso Jalisco, anuncia que se mantendrá una corresponsalía en Guadalajara y que la información que se genere se publicará en la edición nacional y en la página web. Con la posibilidad, dice, “de que Proceso Jalisco reaparezca en una versión digital”. La lápida estaba colocada.

 

Dicen adiós otros impresos

El impreso Más por Más Guadalajara empezó a distribuirse gratuitamente en el Área Metropolitana de Guadalajara el lunes 23 de junio de 2014, refiere el libro Medios de Comunicación y Derecho a la Información en Jalisco, 2014, publicado por Q Análisis Crítico de Medios del ITESO. La nota principal de portada del primer número se tituló “Lo que te cuestan los enredos de los gobiernos”. Se publicaba de lunes a viernes. Se distribuía en algunos cruceros, gimnasios, cafés y otros negocios. Constaba de 24 páginas, con un diseño novedoso y contenidos en el que destacaban notas ligeras con piezas periodísticas a profundidad a cargo de reporteros y análisis por parte de columnistas. En Guadalajara el proyecto lo arrancó el periodista Luis Enrique López. El último número, 661, fue publicado el miércoles 15 de febrero de 2017. Los periodistas Vanesa Robles y Zul de la Cueva aparecen en el ático de la portada como columnistas. Más por más Guadalajara titula como pieza central de su última portada “El último que apague la luz”, que juega con doble intención: por un lado, alude en su sumario a que “el cambio en la tecnología led no ha representado un ahorro para el ayuntamiento. Además de prenderlas durante el día, las lámparas iluminan sin alumbrar”; por el otro, el título insinúa la despedida del impreso. Con el cierre del periódico, la empresa propietaria Más información más beneficios SA de CV continuó con Más por Más en la Ciudad de México y la revista Chilango, que adquirió en 2016. Periodistas que trabajaron en el impreso se reagruparon en el medio digital Okupo Más (okupo.mx). Su primer trabajo publicado el 7 de marzo de 2017 fue de Julio González, titulado “En las grandes ligas de la violencia”. Al día siguiente subieron la entrevista póstuma al periodista Sergio González Rodríguez, la que aparece con el encabezado “La maldición de ver el porvenir que nadie quiere”.

Okupo Más se define como “un espacio colaborativo de expresión, crítica, análisis, difusión de contenidos y humor monocromático, emitiendo desde la zona metropolitana de Guadalajara, Jalisco”. Julio González indica que el medio tiene alianza con El Barrio Antiguo, fundado por Diego Enrique Osorno, y con The Insight.

El otro impreso que cerró en 2017 fue Reporte Jalisco, que en su directorio tuvo como director editorial a Carlos Arroyo. En su último número, el lunes 7 de agosto, publica como nota principal de portada “Guadalajara a la venta”, con el sumario “En vez de otorgar servicios al ciudadano, el gobierno tapatío prefiere vender predios”. Asegura que su tiraje es de cien mil ejemplares gratuitos. Con el lema “comprometidos con la verdad”, su directorio señala que Reporte Jalisco era editado por el Grupo Empresarial Ofertas S. de rl de cv, con oficinas en la avenida Adolfo López Mateos Sur 5114, en Zapopan. La compañía edita los impresos gratuitos Solo Ofertas y Solo Empleos, dedicados a la circulación de publicidad. En el último número, su director general José Félix Tarín Badillo da las gracias a sus, asegura, 200 mil seguidores por consultar el medio todos los días y cada lunes en su versión impresa. “Nuestro medio siempre fue financiado por recursos honestos y ganados con trabajo por más de 300 personas que conforman nuestros periódicos Solo Ofertas y Solo Empleos. Contrario al pensamiento de políticos corruptos que creyeron que nuestros ingresos provenían de algún partido político”. Nuestra mejor prueba es que hoy, añade, “esta es la última edición publicada por falta de recursos. Sí, y al no poder continuar esperamos que nuestra labor haya logrado despertar a miles de conciencias sobre la grave corrupción, prepotencia y falta de humildad de la mayoría de nuestros gobernantes”.

 

Otros cambios

En el sistema de medios de Jalisco destaca que cerró Milenio Radio en la entidad. El director de Milenio Jalisco, Jaime Barrera Rodríguez, informa en su columna “Radar”, el 29 de septiembre, titulada “Milenio se muda”, que extrañarán el 89.1 de fm luego de que el 11 de noviembre de 2011 tuvieron su primera cita con la audiencia radiofónica. Se trató de la primera estación de Milenio Radio. Añade que Grupo Milenio obtuvo recientemente en licitación abierta un canal de televisión abierta en Guadalajara “que entrará próximamente en operación”, y que coincide con el festejo de los primeros 20 años de Milenio Jalisco. “Así, Grupo Milenio se convertirá, como ya pasa en el país, en la empresa periodística multiplataforma más completa en el Occidente de México”. Barrera Rodríguez indica que “en preparación a este momento de evolución y crecimiento, es que tomamos esta decisión estratégica de hacer esta mudanza de nuestra apasionante y querida plataforma de voz del 89.1 a nuestro espacio digital Milenio.com y en nuestras redes, en Facebook Live y Periscope en Twitter”. El director de Milenio Jalisco invita a los radioescuchas a seguirlos en la nueva dirección en el mundo digital, y anuncia que como por disposición oficial todos los celulares deberán tener habilitada la función de radio en fm, queda abierta la puerta para volver al cuadrante radiofónico tapatío.

Al 89.1 de fm y 1370 de am de Guadalajara llegó el programa Las noticias con Javier Alatorre, que empezó a emitirse de 12 a 14 horas desde el 2 de octubre de 2017. El noticiero se enlaza con 50 ciudades.

Otro cambio en la radio estatal es que Imagen Radio Guadalajara, del Grupo Imagen, empezó a trasmitir el programa Imagen Jalisco el 2 de mayo de 2017. De acuerdo con el sitio web imagenguadalajara.com, es un programa radiofónico en donde se analiza, discute y platica sobre el acontecer noticioso y el devenir de la ciudad. Se trata de “un espacio hecho desde Guadalajara, sobre Guadalajara, pero donde caben voces de todo el país y todo el mundo. Lo nuestro no es la formalidad, pero sí lo es la profundidad”. El programa se trasmite en el 93.9 de fm. Lo conducen el experimentado periodista Diego Petersen; el fundador del Grupo Vértice, Alejandro Sierra, y el consultor en política y comunicación estratégica Eduardo Mar de la Paz. Se trasmite de 20 a 21 horas, de lunes a viernes. Imagen Jalisco tiene cuatro secciones: “The dark side” (lo que está detrás de la noticia); “La noticia en llamas” (el acontecimiento más relevante del día); “En 12 minutos” (entrevista con personajes “que transforman la ciudad”; “La barra” (selección de lo que trasciende en artes, cultura, tecnología y buen comer).

La revista Punto Rojo apareció casi al finalizar 2017. En su presentación en la web indica que la integran un grupo de profesionales comprometidos con el periodismo que atiende a la sociedad en sus demandas y reclamos, dispuestos a ofrecer a los lectores información que les ayude a forjar su propio criterio acerca de los asuntos públicos y de aquellos temas que preocupan a la sociedad. Añade que buscan hacer de sus imágenes un referente obligado del testimonial gráfico del tiempo que nos tocó vivir y de los actores sociales. Precisa que en el proyecto participan comunicadores y extrabajadores de diferentes opciones periodísticas registradas en Jalisco durante las últimas décadas, como es el caso de La Jornada Jalisco, Público, Siglo 21, Radio Universidad de Guadalajara, Televisa, Proceso Jalisco, Reporte Índigo, MVS, Nuevo Siglo, Televisa Guadalajara y agencias internacionales. Punto Rojo indica que es una edición impresa producida en Jalisco para su distribución en Guadalajara, la Ciudad de México y Monterrey. “Buscamos, a través de fotografías, ofrecer el referente noticioso de la realidad captada en imágenes. Con las notas periodísticas damos a la población información objetiva, oportuna y veraz, comprometida con el acompañamiento de los diversos procesos por los que transita la sociedad mexicana”. El nombre de Punto Rojo surge del rescate de un cabezal utilizado por un medio impreso, “perdido entre los empolvados archivos del periodismo mexicano”. Explica que Punto Rojo fue una publicación impulsada por intelectuales como Praxedis Gilberto Guerrero Hurtado y los hermanos Flores Magón, entre 1908 y 1909. Bajo el lema: “No soy una mercancía, soy una idea; y las ideas no se compran, se defienden”, aquel Punto Rojo logró publicar más de 10 mil ejemplares, aunque esa revista desapareció momentos antes del gran movimiento social de 1910.

En síntesis, el sistema de medios en Jalisco registró importantes cambios en 2017, que se caracterizaron por una parte por el cierre de informativos, pero también por el surgimiento de otras opciones periodísticas nuevas, tanto impresas como digitales y en la radio, que buscan posicionarse en el periodo previo a las elecciones de 2018.

Presentación

Graciela Bernal Loaiza

 

En noviembre de 2008 el Observatorio de Medios del ITESO publicó el primer informe Medios de comunicación y derecho a la información en Jalisco. Esa edición fue realizada por tres estudiantes y Juan Larrosa–Fuentes, primer coordinador del observatorio, quien en la presentación de ese primer volumen compartió los propósitos del proyecto editorial: compilar las coyunturas más importantes relativas a los medios de comunicación y el derecho a la información en Jalisco; establecer las bases para investigar y documentar los temas más relevantes en materia de comunicación en la entidad, y ofrecer un espacio de reflexión para estudiantes e interesados en estos temas. En ese texto el coordinador señaló que la aspiración de “este ejercicio de documentación es que pueda realizarse año con año y que cada edición se construya de forma más compleja, hacer un trabajo de investigación de mayor alcance, profundizar en los temas y publicar los resultados del observatorio de medios” (Larrosa, 2008). El primer informe tuvo una extensión de 55 páginas y un tiraje de 30 ejemplares que fueron vendidos con el propósito de recuperar sus costos de producción. Con ese arranque, el proyecto a lo largo de una década ha visto cristalizado sus propósitos y refrendado su compromiso. Hoy, el informe goza de reconocimiento y apoyo institucional, es parte de los proyectos departamentales; se ha constituido en un referente local y se mantiene como la única publicación dedicada a los medios de comunicación y el derecho a la información en Jalisco.

Con el informe Medios de comunicación y derecho a la información en Jalisco, 2017, el Departamento de Estudios Socioculturales (DESO) del ITESO celebra su décima edición. El devenir del proyecto editorial del observatorio de medios refleja su consolidación, trasformaciones, crecimiento, desarrollo y alcances. Entre las trasformaciones que el observatorio de medios ha experimentado se encuentra su nueva adscripción. Desde 2017 pasó a formar parte de ETIUS Observatorio de Comunicación y Cultura del DESO. Este nuevo observatorio departamental se configuró en un espacio de producción académica que busca responder a las Orientaciones Fundamentales de la universidad y a su Misión, a los planes de desarrollo académico de la Dirección General Académica y del DESO. Dentro de este marco el nuevo observatorio se propone realizar, de manera permanente y sistemática, observaciones de procesos y prácticas de producción social de sentido, en respuesta a necesidades de conocimiento del contexto sociocultural, político y económico de su entorno inmediato, de la región, el país y el mundo, a través de la producción académica desarrollada en los espacios de aprendizaje de los programas educativos de licenciatura y posgrado del DESO y otras entidades académicas universitarias. Es un proyecto académico, educativo, de
investigación y vinculación de largo aliento comprometido en la promoción del diálogo académico y el debate público a través de la difusión de conocimientos e información sobre temas socialmente pertinentes.

Dentro de este marco el observatorio de medios del ITESO presenta esta décima edición. Refrenda su compromiso de continuar este proyecto editorial, ahora como parte de ETIUS Observatorio de Comunicación y Cultura del DESO.

Para Jalisco, 2017 fue un año de cambios, reajustes, avances y retrocesos en materia de derecho a la información. Cerró la revista Proceso Jalisco después de más de 12 años de participar en el mercado de la información local; aumentó de manera significativa la oferta de sitios periodísticos en línea; el diario El Informador celebró su centenario; hubo un retroceso fundamental en materia de derecho de las audiencias provocado por presiones de actores políticos, medios de comunicación y periodistas que lograron imponerse ante la autoridad competente; el Congreso del Estado dio la espalda a propuestas ciudadanas de modificación a la Ley Orgánica del Sistema Jalisciense de Radio y Televisión; los temblores ocurridos en varias entidades del país, y particularmente el sismo del 19 de septiembre en la Ciudad de México, revelaron la falta de profesionalismo y responsabilidad social de los medios de comunicación en la cobertura que dieron al desplome del Colegio Enrique Rébsamen, que dio lugar a la historia sobre “Frida Sofía”; se presentaron fuertes tensiones entre el poder político y los medios de comunicación, particularmente entre Enrique Alfaro Ramírez, presidente municipal de Guadalajara y algunos diarios del área metropolitana;
fue un año que confirmó la precaria situación laboral en la que se encuentran los periodistas, en contextos de inseguridad y riesgo en su ejercicio profesional, y avanzaron con lentitud los proyectos de radios comunitarias en el estado.

Estos temas forman parte de lo que se presenta en este informe. Además, ofrece textos analíticos sobre el nombramiento de la comisionada presidenta del Instituto de Transparencia y Acceso a la Información en Jalisco (ITEI), sobre las nuevas formas de comunicación política en la entidad, y un estudio sobre la cobertura de medios impresos sobre la elevación de la cortina en la presa de El Zapotillo. Por último, se dedicaron semblanzas a comunicadores locales que fallecieron durante 2017: Antonio Venzor Castañeda, Jonathan Rodríguez Córdova, Gustavo Adolfo Sánchez y Luis René Navarro Figueroa.

El informe contiene 17 textos elaborados por profesores y estudiantes del iteso, académicos de la Universidad de Guadalajara, representantes de organizaciones de la sociedad civil y profesionales del periodismo. Con este número este proyecto editorial renueva su compromiso de documentar, analizar y reflexionar en torno al derecho a la información en la entidad, con el propósito de mantener activa la memoria como recurso de conocimiento, aprendizaje, reflexión y acción en el proceso de democratización en el que nos encontramos.

La línea de observación sobre medios de comunicación de etius Observatorio de Comunicación y Cultura reafirma
su convicción de mantenerse como un espacio de trabajo universitario analítico, crítico y propositivo, así como de cultivo de la memoria colectiva sobre acontecimientos y coyunturas relevantes en materia de comunicación y derechos a la comunicación. Busca incidir en las condiciones de su ejercicio, cada vez más controladas y limitadas por actores del poder político, mediático y del crimen organizado. La defensa de estos derechos, su promoción y difusión constituye el sentido fundamental de este proyecto.

Referencias

Larrosa, J. (2008). Medios de comunicación y derecho a la información en Jalisco, 2008. Guadalajara: Quid Observatorio de Medios, Departamento de Estudios Socioculturales–ITESO.

Medios de comunicación y derecho a la información en Jalisco, 2017

Periodo: enero – diciembre 2017

Para Jalisco, 2017 fue un año de cambios, reajustes, avances y retrocesos en materia de derecho a la información. El informe contiene 17 textos elaborados por profesores y estudiantes del ITESO, académicos de la Universidad de Guadalajara, representantes de organizaciones de la sociedad civil y profesionales del periodismo. Con este número este proyecto editorial renueva su compromiso de documentar, analizar y reflexionar en torno al derecho a la información en la entidad, con el propósito de mantener activa la memoria como recurso de conocimiento, aprendizaje, reflexión y acción en el proceso de democratización en el que nos encontramos.

Graciela Bernal Loaiza
Coordinadora

Publicado:2019-01-31

Contenido

Presentación

 

I. Medios de comunicación en Jalisco

Cierra Proceso Jalisco; cambios en la radio local
Sergio René de Dios Corona

 

Medios digitales en Guadalajara: la información se abre paso en las redes sociales pero no siempre a manos de periodistas
Iván González Vega

 

Los derechos de las audiencias. la sobrerreacción de políticos y medios de comunicación
Magdalena Sofía Paláu Cardona

 

Reforma a la Ley Orgánica del Sistema Jalisciense de Radio y Televisión
Cristina Romo Gil

 

¿Cómo se construyó la historia de Frida Sofía?
Coordinador: Julio González

 

Un cambio de la comunicación gubernamental y política. De los medios de comunicación a las redes sociales
Luis Guillermo Natera Orozco

 

Historia de una tortuosa relación. Enrique Alfaro y los medios de comunicación en Jalisco
Jorge Enrique Rocha Quintero

 

Agresiones contra periodistas y promulgación de la Ley de protección en Jalisco
Frida V. Rodelo y Darwin Franco

 

Despidos en organizaciones periodísticas locales. Una constante incertidumbre
Julio González

 

El Informador, cien años después
María Elena Hernández-Ramírez

 

Un acercamiento a experiencias de la radio de uso social y en línea en Jalisco
Gilberto G. Domínguez Márquez

 

II. Derecho a la información

Cobertura mediática en medios impresos sobre la elevación de la cortina en la presa de El Zapotillo
Hernán Muñoz Acosta y María Quinn

 

El nombramiento de la comisionada presidenta del ITEI: un nuevo camino en las designaciones públicas
Carlos Aguirre

 

III. Los que se fueron

Antonio Venzor Castañeda (1952-2017)
Alfredo Sánchez Gutiérrez

 

Jonathan Rodríguez Córdova
Roberto García Orozco

 

Gustavo Adolfo Sánchez. Un recuerdo para pensar el periodismo
Octavio Covarrubias Vargas

 

Luis René Navarro Figueroa (1936-2017)
Isabelana Noguez Pérez

 

Acerca de los autores

 

Comité Editorial

 

ETIUS Observatorio de Comunicación y Cultura

ETIUS Observatorio de Comunicación y Cultura Sistemas de Comunicación

El ITESO a través de ETIUS Observatorio de Comunicación y Cultura busca promover entre su comunidad educativa nuevos espacios de construcción de conocimiento mediante proyectos de observación / investigación / difusión / vinculación como una forma de atender algunos desafíos que le plantea la vida social y sus entornos.

ETIUS Observatorio de Comunicación y Cultura opera desde la primavera de 2018 en el Departamento de Estudios Socioculturales. Este observatorio capitaliza la experiencia y los aprendizajes de más de 10 años de Q ITESO: Análisis Crítico de Medios.

Se define como un proyecto universitario articulador de la producción académica que se realiza en programas educativos de licenciatura y posgrado, en el que participan estudiantes y profesores en los procesos de construcción de conocimiento sobre problemas del acontecer sociocultural y sociopolítico. Se distingue por centrar sus observaciones en los fenómenos comunicativos que los constituyen. Mediante proyectos específicos que atienden coyunturas, ETIUS busca la construcción de sentido en los procesos de formación académica y profesional de cara a las necesidades del conocimiento socialmente pertinente.

ETIUS mantiene la línea de observación sobre los sistemas de comunicación, e incorporó como objetos de su trabajo los relacionados con lo socioambiental, el periodismo, los procesos electorales y la publicidad con el objetivo de contribuir y participar en el debate académico y público para la trasformación de la significación de la realidad social que promueva prácticas orientadas al logro de una sociedad más justa, humana y digna.

Los resultados del trabajo de este observatorio pueden ser consultados en: etius.iteso.mx

Comité Editorial

Graciela Bernal Loaiza es licenciada en Ciencias de la Comunicación y maestra en Política y Gestión Pública por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO). Fue coordinadora del Programa en Ciencias de la Comunicación de 1999 a 2002 en esa casa de estudios. Actualmente es profesora titular del ITESO, adscrita a la Unidad Académica Básica Sistemas de Comunicación, Información y Democracia del Departamento de Estudios Socioculturales. Es representante del ITESO en la Red Derecho a la Información y Democracia de la Asociación de Universidades confiadas a la Compañía de Jesús en América Latina (AUSJAL). Fundadora del Capítulo Jalisco de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información y su presidenta de 2013 a 2015. Es coordinadora de ETIUS Observatorio de Comunicación y Cultura del ITESO.

Susana Herrera Lima es profesora investigadora del Departamento de Estudios Socioculturales del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO). Doctora en Estudios Científico Sociales por el ITESO en el área de Comunicación, Cultura y Sociedad. Maestra en Comunicación de la Ciencia y la Cultura por el ITESO. Líneas de investigación: comunicación pública de la ciencia, comunicación y medioambiente, ciencia, tecnología y sociedad. Miembro del Programa Formal de Investigación en Estudios Socioculturales. Participa en proyectos interdisciplinarios de investigación sobre problemas de agua y territorio en el Grupo de Estudios del Agua del ITESO, en el Observatorio de Comunicación y Cultura coordinando la línea de comunicación y medioambiente, en proyectos de comunicación pública de la ciencia con participación ciudadana. Fundadora y coordinadora de la colección de libros De la Academia al Espacio Público, que reúne trabajos de investigación en comunicación pública de la ciencia. Miembro de la Red Public Understanding of Science and Technology (PCST), de la International Environmental Communication Association (IECA), de la Red Waterlat y de la Sociedad Mexicana para la Divulgación de la Ciencia y la Técnica (Somedicyt). Miembro del Sistema Nacional de Investigadores de México.

Jorge Alejandro Narro Monroy es profesor numerario del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), adscrito al Departamento de Formación Humana. Es licenciado en Filosofía y Ciencias Sociales y maestro en Política y Gestión Pública. Fue consejero electoral en el Consejo Local (estatal) del Instituto Federal Electoral (IFE) durante los procesos electorales de 2000, 2003 y 2007. Pertenece al Capítulo Jalisco de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi) y al Centro de Justicia para la Paz y el Desarrollo (CEPAD). Fue fundador del desaparecido diario Siglo 21, donde se desempeñó como editor de la sección de información local.

Diego Armando Mejía Picón es licenciado en Ciencias de la Comunicación por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO). En 2010 se inició en el periodismo en el semanario universitario Cruce y en el análisis de las estructuras mediáticas en Q ITESO: Análisis Crítico de Medios. Hizo prácticas profesionales en el diario El Informador. De 2012 a 2017 colaboró para los diarios guanajuatense Correo y Am/Al Día, y desde 2017 pertenece a la Subdirección de Formación Integral de la Universidad Tecnológica del Norte de Guanajuato, donde se desempeña como docente.

Pedro Mellado Rodríguez es periodista con 45 años de trayectoria profesional en medios de la Ciudad de México, Jalisco, Sinaloa y Estados Unidos. Ha sido reportero, jefe de información, jefe de redacción, editor, subdirector y director, así como editorialista, conductor de programas de radio y televisión, y coordinador de equipos de investigación periodística. Su columna “Puntos y contrapuntos” se ha publicado desde hace 34 años en distintos medios. Actualmente conduce en Radio Metrópoli el programa “Política en Directo” y publica su columna en la plataforma digital partidero.com. Es profesor en la Licenciatura de Periodismo y Comunicación Pública en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), en Guadalajara. Tiene estudios de derecho por la Universidad de Guadalajara.

Guillermo Orozco Gómez es profesor titular y director del Departamento de Estudios de la Comunicación Social de la Universidad de Guadalajara. Especializado en Pedagogía por la Universidad de Colonia, Alemania (1977). Maestro y doctor en Educación (1988) por la Universidad de Harvard. Es miembro de la Academia Mexicana de Ciencias y del Sistema Nacional de Investigadores, nivel 3. Responsable de la Cátedra UNESCO-UNAOC-MILID: Media and Information Literacy and Intercultural Dialogue para América Latina. Ha sido Catedrático unesco de Comunicación Social en las universidades Javeriana de Colombia (1996) y Autónoma de Barcelona (2001). Es catedrático Humanitas por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey. Cocoordinador Internacional del Programa Obitel: Observatorio Iberoamericano de Ficción Televisiva. Ha escrito más de 80 artículos y capítulos de libros, es autor o coautor de 20 libros y coordinador de más de 20. Sus últimos libros: Televidencias: Comunicación, Educación y Ciudadanía (2014, que se tradujo al portugués); Al Filo de las Pantallas (2015), TvMorfosis 6: gestión y consumo de contenidos digitales. Nuevos modelos (2017).

Rosalía Orozco Murillo fue periodista. Es licenciada en Letras y maestra en Comunicación por la Universidad de Guadalajara. Coordinó la Licenciatura en Periodismo en el Centro Universitario de la Ciénega (Cuciénega) de la Universidad de Guadalajara (2008 a 2010). Dirigió el Centro de Formación en Periodismo Digital (febrero 2011 a septiembre 2019) y coordinó la Maestría en Periodismo Digital (febrero 2012 a septiembre 2019), en UDG Virtual, donde es profesora de tiempo completo. Investiga temas relacionados con la relación medios–poder y las trasformaciones del periodismo. Ha asesorado 16 proyectos de periodismo digital en México. Es miembro de la Red Latinoamericana de estudios sobre el mundo del trabajo del periodista. Desde octubre de 2017 preside la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi), capítulo Jalisco.

Magdalena Sofía Paláu Cardona es licenciada en Ciencias de la Comunicación por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), maestra en Ciencias Sociales con especialidad en Comunicación Social por la Universidad de Guadalajara y doctora en Estudios Científico–Sociales por el ITESO. Es profesora numeraria de esa institución y colabora como académica en el Departamento de Estudios Socioculturales desde 1997. Coordinó el observatorio Q ITESO: Análisis Crítico de Medios de 2013 a 2017. Colaboró en el equipo coordinador de ETIUS, observatorio de comunicación y cultura de 2017 a 2019 y continúa como asesora de ese observatorio. Actualmente es coordinadora del Doctorado en Estudios Científico–Sociales. Su trabajo de investigación gira en torno a la historia y estructura de los sistemas de comunicación, la economía política de la comunicación y la cultura, la comunicación política en los procesos electorales y los observatorios de medios. Fue coordinadora de la Red de observatorios de medios de comunicación del Consejo Nacional para la Enseñanza y la Investigación de las Ciencias de la Comunicación (ROM–Coneicc) de 2016 a 2019. Es miembro del Capítulo Jalisco de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi) y de la Asociación Mexicana de Investigadores de la Comunicación (AMIC).

Jorge Enrique Rocha Quintero es director de Integración Comunitaria del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO). Es licenciado en Sociología por la Universidad de Guadalajara y en Filosofía por la Universidad del Valle de Atemajac. Tiene una maestría en Impactos Territoriales de la Globalización por la Universidad Internacional de Andalucía y es doctor en Estudios Científico–Sociales por el ITESO. Ha colaborado en diferentes programas de medios de comunicación y como articulista en el Semanario de Guadalajara y en las revistas El Puente y Christus. Es profesor invitado en la Universidad Iberoamericana León.

Cristina Romo Gil (+)[*] es licenciada en Ciencias y Técnicas de Información por la Universidad Iberoamericana y maestra en Comunicación por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO) de Guadalajara. Desde 1969 fue profesora de la carrera de Ciencias de la Comunicación del ITESO y su directora de 1978 a 1981. Es profesora numeraria y emérita del ITESO. Fundadora del Consejo Nacional para la Enseñanza y la Investigación de las Ciencias de la Comunicación (Coneicc) de la que fue presidenta, y ahora es miembro honorario. Fundadora de la Federación Latinoamericana de Facultades de Comunicación Social (Felafacs), directora por México durante diez años; actualmente forma parte de su Consejo Consultivo. Formó parte del Consejo Consultivo del Sistema Jalisciense de Radio y Televisión, del que fue su primera presidenta. Fue consejera ciudadana de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco. Miembro fundador de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi), fundadora y primera presidenta del Capítulo Jalisco.

 

[*] Falleció el 23 de diciembre de 2019.

Acerca de los autores

Jimena Aguirre de la Torre es estudiante de la Licenciatura en Periodismo y Comunicación Pública en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO). Ha publicado en el blog Perfiles y colaborado en actividades sobre gestión de la literatura. Entre sus intereses se encuentran el periodismo cultural, la investigación de temáticas relacionadas con perspectiva de género, movimientos sociales, y la promoción y el impacto de la literatura. Actualmente colabora en el proyecto colectivo Dime Poesía del ITESO.

Sergio René de Dios Corona es periodista desde hace 35 años. Ha laborado y colaborado en una docena de medios de comunicación. Ha sido reportero, jefe de información, jefe de redacción, editor, columnista, conductor de radio y director editorial. Estudió la Licenciatura en Ciencias y Técnicas de la Comunicación, la maestría en Programación Neurolingüística y el doctorado en Educación para la Formación Profesional. Es autor o coautor de una veintena de libros. Es profesor universitario desde hace más de 25 años. Ha coordinado dos licenciaturas en igual número de universidades. De las principales universidades y medios informativos locales recibió en 2010 el Premio Jalisco de Periodismo a la trayectoria periodística. Actualmente es profesor en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO) y en la Universidad de Guadalajara. Le apasionan el poder y la belleza del lenguaje. Lo atrapan la lectura, la música y una buena charla.

Estéfany Citlali Franco Anguiano es estudiante de la Licenciatura en Periodismo y Comunicación Pública del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO). Es originaria del municipio de Amacueca, Jalisco, donde labora como profesora suplente de inglés. En 2018 colaboró con la traducción y trascripción de entrevistas para el documental “New Old Stories From Abroad” producido por la ONG Multicultural Integration Community Support (MICS), ErreDoce Cine, City of Ryde y Kuring–gai Council con el apoyo de Macquarie University de Australia y el ITESO. Link: https://vimeo.com/328524618 Contraseña: mics2019.

Julio González González Durán. Periodista egresado de la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), donde fue profesor del Observatorio ETIUS Comunicación y Cultura de agosto de 2017 a julio de 2019. Estudiante de la maestría en Periodismo sobre Políticas Públicas en el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE). Coordina el sitio Okupo+, donde publica la columna “Sepa la bola”. Fue productor del programa de radio “Imagen Jalisco” del 93.9 fm, un espacio de conversación política, noticias y entrevistas. Durante más de dos años publicó una columna quincenal en el periódico Máspormás gdl, donde también fue reportero. Ha colaborado para el periódico El Informador. Sus crónicas y reportajes han aparecido en El Economista, El Barrio Antiguo, Territorio, Artículo siete y Americas Quarterly.

Juan S. Larrosa–Fuentes. Obtuvo los grados de licenciado, maestro y doctor por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), la Universidad de Guadalajara y la Universidad de Temple, respectivamente. Ha sido profesor universitario en estas tres casas de estudio. Actualmente es profesor de tiempo completo en el Departamento de Estudios Socioculturales del ITESO. Ha publicado en las revistas International Journal of Communication, Tripodos, Comunicación y Sociedad y Global Media Journal México. Además, es coautor, junto con Sofía Paláu, del libro Manual para la observación de medios (ITESO, 2014), así como autor y coordinador de varios libros sobre comunicación política. Sus intereses en el estudio de
la comunicación se concentran en la comunicación política, el periodismo y en la economía política de la comunicación y la cultura.

José Bernardo Masini Aguilera es doctor en Historia Moderna y Contemporánea por el Instituto Mora; maestro en Lingüística Aplicada por la Universidad de Guadalajara y licenciado en Ciencias de la Comunicación por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO). Ha impartido cursos de licenciatura como Historia y estructura de los sistemas de Comunicación, Derecho de la Comunicación, Teoría del periodismo y Observatorio de la Comunicación I y II. También ha colaborado como asesor del observatorio de medios ETIUS en el Departamento de Estudios Socioculturales del ITESO. Se especializa en el estudio historiográfico de las relaciones entre el poder político y las figuras mediáticas a través de herramientas como el análisis crítico del discurso. Actualmente es coordinador de Investigación y Posgrado del ITESO. Miembro del Capítulo Jalisco de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi) desde su creación en 2008, donde ha colaborado como secretario (2008–2010); como tesorero (2011–2015) y como presidente (2015–2017). Entre 2017 y 2019 fue miembro del nodo Jalisco de la organización Wikipolítica.

José Antonio Fernández Salazar (1946-2018)

Estéfany Franco

 

José Antonio Fernández Salazar nació en Guadalajara, Jalisco, el 1 de febrero de 1946, en una familia de nueve hermanos. Mejor conocido como “Pepe Fernández”, trabajó durante más de 34 años en el periodismo tapatío y mexicano.

Concluidos sus estudios de bachillerato, se inscribió en la Licenciatura en Derecho de la Universidad Autónoma de Guadalajara. Sin embargo, al momento de revisar la lista de admitidos, su nombre no apareció en ellas. Se dirigió a la facultad de Derecho para hablar con Gonzalo Leaño Reyes, el entonces director académico, para aclarar la situación. Ante lo sucedido Leaño le comentó que decidió cambiarlo de carrera con la explicación de que la universidad necesitaba un medio de comunicación, pues tenía la propuesta de crear un noticiero estudiantil. Fue así como ingresó a la Licenciatura en Periodismo y Comunicación Social, según indica Gabrial Ibarra Bourjac en un artículo publicado en el semanario Conciencia Pública en 2018.

Al culminar sus estudios universitarios en 1968 trabajó en la misma universidad, en el noticiero interno “Televisión Universitaria”, que se trasmitía en la cafetería del campus, con temas y notas sobre esa institución educativa. Este fue su primer trabajo en la televisión.

Comenzó su carrera profesional en el periódico Ocho Columnas. En 1983 se trasladó a Toluca para trabajar en dos programas del canal de televisión del Sistema Mexiquense de Radio y Televisión. En esos años Luis Fernando Quiñones Betancourt, su amigo y en ese entonces jefe de noticieros de Televisa de Occidente, le dijo que había un lugar vacante en Televisa Guadalajara e inmediatamente regresó a su ciudad natal. Fue así como en 1985 se incorporó a trabajar en Canal 4, y doce años después, en 1997, se convirtió en el titular del noticiero nocturno de esa televisora.

 

Un periodista polémico

En una entrevista realizada a Claudia Rebeca Reynoso, mejor conocida como “Becky” Reynoso, quien fue compañera de José Antonio Fernández durante más de diez años en el noticiero nocturno “GDL Noticias”, dijo que gracias a su trabajo de conductor gozó del aprecio de la audiencia y de sus compañeros. Mencionó que fue un periodista que tenía mucha intuición e interés por las notas y asuntos relacionados con temas políticos (C. R. Reynoso, comunicación personal, 26 de marzo de 2019).

Su interés por la política lo llevó a tener relaciones de amistad con políticos y funcionarios de gobierno, a quienes solía recurrir para enterarse de temas de las administraciones públicas en los planos municipal y estatal. Para ciertos grupos de periodistas que asumían su labor informativa con independencia estas relaciones no eran bien vistas.

Su labor como conductor de noticieros le permitió abrir nuevos espacios en la programación del canal. Dirigió los programas “Foro al tanto”, “Debate de los lunes por la noche”, “Noticiero nocturno” y “Tela de juicio” en la radio. En “Foro al tanto” se distinguió por colocar agendas sobre temas de interés público local, como trasporte público, seguridad, cultura, educación superior, espectáculos, entre otros. Este programa, que se trasmitía los domingos por la mañana, logró posicionarse en la opinión pública de Jalisco.

El programa “Foro al tanto GDL” fue una de las aportaciones que dejó el periodista, debido a su formato de debate. En el foro participaban ocho invitados, y si uno de ellos confirmaba su asistencia y no acudía colocaban en su asiento un “mono’’, es decir un muñeco, con lo que surgió la frase “si no vas te monean”. Esta forma de poner en evidencia a los invitados faltistas no era del agrado de muchos de ellos.

De igual manera, su participación en el programa “Debate de los lunes por la noche” se distinguió por la polémica que generaban sus comentarios y su manera de conducir.

Además, trabajó en la radio, en el programa “Tela de juicio”, con Becky Reynoso y Jorge Robledo, en la estación dk 1250 am del Grupo Radiorama de Occidente.

Adicionalmente a sus labores en la televisión y la radio, fue representante de Televisa en el Consejo Directivo del Premio Jalisco de Periodismo. Este premio se entrega desde 1995 con la finalidad de promover la calidad y la excelencia en la práctica del oficio periodístico, así como para distinguir a los periodistas sobresalientes del estado.

El trabajo de José Antonio fue del agrado de unos y objeto de la crítica y el enojo de otros, precisamente por sus vínculos cercanos con políticos de alto nivel, del mundo empresarial y hasta religioso. De acuerdo con una nota de Celso Mariño publicada en el periódico Milenio en 2018, durante la década de los noventa del siglo xx formó parte, junto con Héctor Morquecho, José María Pulido y Marco Nava, de una comunidad de periodistas llamada “El grupo del Arthur’s”, que se daba cita cada viernes por la noche en el restaurante bar de ese nombre, en donde recibían, para conversar, cenar y tomar unos tragos, a una diversidad de personajes. Según Mariño, “el grupo comenzó a ser uno de los mitos urbanos más grandes del medio público, pues se rumoraba —sin fundamento— que allí se dictaba ‘línea’ de cómo abordar la agenda pública en los medios de comunicación” (Mariño, 2018).

 

Trabajó hasta el último aliento

Siempre que le iban a tomar una foto o le iban a realizar una entrevista le gustaba adoptar una pose con los brazos cruzados. Esa postura caracterizó su imagen pública.

José Antonio trabajó semanas antes de morir. No permitió que nadie más hiciera los dos foros a los que se había comprometido con los candidatos al gobierno del estado de Jalisco durante el proceso electoral de 2018.

Falleció el 5 de septiembre de 2018, a la edad de 62 años, a escasos siete meses de haber sido diagnosticado con cáncer de pulmón.

 

Referencias

Ibarra Bourjac, G. (2018, 7 de septiembre). Los Hombres del Poder: José Antonio Fernández, quería ser abogado y Gonzalo Leaño lo hizo periodista. Conciencia Pública. Recuperado de http://concienciapublica.info/2018/09/07/los-hombres-del-poder-

Mariño, C. (2018, 6 de septiembre). La leyenda urbana del grupo Arthur’s. Milenio. Recuperado de https://www.milenio.com/politica/comunidad/la-leyenda-urbana-del-grupo-arthur-s

Tela de Juicio (2017, 24 de mayo). Grupo Radiorama de Occidente dk 1250 am. Recuperado de http://www.dk1250.mx/2017/05/24/tela-de-juicio/

Ernesto Zenteno Covarrubias, un maestro para recordar (1928–2018)

Jimena Aguirre de la Torre

 

“¡Maestro!”, respondía el señor Zenteno con ironía, “¡ya la tengo! ¿A poco cree que voy empezando?” Esta era la respuesta que Julio César Hernández, jefe de información en el diario Ocho Columnas,[1] recibía cuando le decía a don Ernesto Zenteno cómo debía tomar una fotografía (J.C. Hernández, comunicación personal, 25 de junio de 2019). No es que este no preguntara a los reporteros y a los directores qué era lo que buscaban, porque siempre lo hacía, sino que su respuesta, como parte de su carácter bromista, también dejaba entrever algo más serio: que, tras 66 años como reportero gráfico, Ernesto Zenteno Covarrubias sabía cómo hacer su trabajo.

Los codos pegados al cuerpo y una mano sosteniendo la cámara. Un desliz en el enfoque y un dedo sobre el disparador. Para reconocer a un fotógrafo de prensa bastaba con observar que estos detalles ocurrieran al mismo tiempo, pero toparse con don Ernesto Zenteno no era solamente distinguir a un reportero gráfico sino a un fiel testigo de Guadalajara, cuyo nombre no podía ir separado de un “oiga, Maestro”, apodo que cariñosamente se había ganado por parte de aquellos que coincidieron con él.

Ernesto Zenteno nació el 8 de noviembre de 1928 en la Ciudad de México. Lo que sería el inicio de su trabajo dentro de la fotografía ocurrió a la edad de siete años cuando, tras la muerte de su madre, comenzó a trabajar en los laboratorios Fotomateriales de México. Acompañado por Bartolomé Ornelas Martínez, quien durante muchos años laboró en el diario Esto y a quien el fotoperiodista recordaba como su mentor, Zenteno fue adquiriendo sus conocimientos en la práctica cotidiana.

En el año 1942 llegó a Guadalajara. Su comienzo en el periodismo de la ciudad fue en 1944, con su entrada a El Occidental y, un año más tarde, a El Sol de Guadalajara, ambos diarios pertenecientes, en su momento, a la Organización Periodística García Valseca, cadena de su añorado jefe y primer patrón, el coronel José García Valseca.

Tras 36 años de haber realizado coberturas para estos dos diarios, Ernesto Zenteno empezó a trabajar en el Ocho Columnas, donde capturó la historia de Jalisco durante 30 años, hasta su salida del periódico en 2011, cuando este cerró.

Como fotoperiodista, pasaba por todas las secciones y sus actividades del día siempre eran distintas a las del siguiente. Política, sociales o deportes: así como se le podía encontrar en partidos de futbol también se le veía en manifestaciones, ruedas de prensa o en el Ayuntamiento, dice Marco Aurelio Vargas, quien coincidió con él en distintas coberturas entre 1993 y 1997 (M.A. Vargas, comunicación personal, 3 de abril de 2019). Su hijo, Ernesto Zenteno Ortega, quien trabajó con él durante muchos años, afirma que así como en un momento podían estar en una balacera, de repente estaban en una fiesta y luego en un velorio: “Él cubría donde le dijeran, era lo que iba surgiendo en el día y él todo lo disfrutaba” (E. Zenteno Ortega, comunicación personal, 22 de junio de 2019).

Una o dos cámaras, lentes, rollos… De estatura baja y con su chaleco siempre puesto, era común encontrarse al señor Zenteno en las coberturas, cargando con su equipo. La historia de Guadalajara quedó retratada en cada una de las fotografías que conseguía de uno u otro modo. Ya fuera subiéndose a una escalera o a un árbol, el toque del reportero gráfico buscaba algo muy particular: que la fotografía hablara por sí misma.

Julio César Hernández dice que él siempre llegaba temprano a todas sus asignaciones: “Le gustaba llegar antes, conocer el terreno. Si llegaba a un evento donde había personas, él empezaba a tomar fotos para el archivo, que no fueran nada más pose en el presídium, sino activas, de personas platicando o haciendo gestos” (J.C. Hernández, comunicación personal, 25 de junio de 2019).

Su perseverancia por darle vida a su trabajo es recordada por su hijo, a quien alguna vez su padre le comentó: “Siempre hay que tomar las acciones, a tu alrededor siempre hay, pero hay que buscarle. No nada más la cámara se mueve el frente, también para abajo, para arriba, para los lados”.

Capturar la imagen como tuviera que hacerlo. El objetivo de Ernesto Zenteno era cumplir. Mario Ávila, quien fue su compañero en El Occidental y más tarde en el Ocho Columnas, lo describía como una persona fuerte y decidida, proveniente de una disciplina en la cual las órdenes de trabajo tenían que ser cumplidas sin ningún pretexto: “Podía faltar el reportero, pero no el gráfico, porque este tenía que llevar la imagen de la inauguración, de cuando están cortando el listón o del gol cuando lo anotaron” (M. Ávila, comunicación personal, 8 de abril de 2019).

Esta responsabilidad la encontró su hijo Ernesto Zenteno Ortega, quien descubrió en su papá a un mentor: “Con todas las cosas que hagas, cumple, porque esa es tu tarjeta de presentación. No hay necesidad de que te ande recomendando gente, tú mismo te vas a recomendar”, le decía.

Ávila lo recuerda como un maestro que, en un principio, era celoso de su trabajo. Cuenta una anécdota en la que una vez Zenteno lo recibió con los codos: “El truco era al momento de tomar la foto, levantar los codos y taparles a tus compañeros […], y esa me la aplicó una vez: levantó los brazos y me jodió mi foto”, narra entre risas. “Si antes era un compañero de cámara que quería sacar la mejor foto y te ocasionaba alguna agresión, era porque su objetivo era cumplir, cumplir de la mejor manera y mejor que los demás”, comenta Ávila que, admirado por su disciplina y responsabilidad, nunca le reprochó.

Cuando volvió a encontrarse con Zenteno en el Ocho Columnas, ya con más de 60 años, era muy distinto: generoso con sus compañeros y enseñando trucos y tácticas, se preocupaba por las coberturas de las órdenes de trabajo
y preguntaba a sus compañeros en dónde se sentían mejor, mientras daba cuenta de sus habilidades.

Mario Ávila narra un acontecimiento que sin duda hizo a los fotoperiodistas poner los pies sobre la tierra: la transición de lo análogo a lo digital. Con nuevas técnicas y periodistas más jóvenes integrándose, las “magias que solo sabíamos los que utilizábamos cámaras análogas ya no servía, lo tuvimos que tirar todo a la basura”. Zenteno llegó así. Pero lo realmente importante fue que sobrevivió.

Varios de sus compañeros dejaron el periodismo, pero él se adaptó a las nuevas tecnologías, informando a través de una imagen sin importar cómo tuviera que hacerlo, dice Raquel Flores, quien, tras convivir con él entre los años 2008 y 2011 en el diario Ocho Columnas, admiró la pasión con la que realizaba su trabajo (R. Flores, comunicación personal, 8 de abril de 2019).

Con 66 años de trayectoria periodística, Ernesto Zenteno seguía encerrando a un veinteañero en sus “sesenta y tantos años”, como así les respondía a los compañeros que recibían un número distinto cada vez que le preguntaban por su edad, la cual escondía tras su vitalidad y amor por la fotografía, como tienen presente Alejandra Díaz y Laura Gutiérrez, que trabajaron con él en el Ocho Columnas.

Además de ser recordado como un excelente fotógrafo, Ernesto Zenteno era querido y respetado. Ya fueran reporteros de El Occidental, del Ocho Columnas o de cualquier otro diario, a Zenteno se le refería como “el Maestro”. Su pasión por la fotografía iba de la mano con enseñarla, y sus años de experiencia le valieron el conocimiento de técnicas que nunca dudó en compartir.

“Maestro, ¿aquí cuánto le doy?”, le preguntaban sus compañeros a Zenteno, cuenta su hijo, que recuerda cómo tras algún consejo brindado por su padre los otros fotógrafos iban con él a decirle: “Oiga, su papá tiene un exposímetro en su vista, pero bien atinado”.

Juan Carlos Núñez, quien era reportero del diario Siglo 21, lo recuerda con respeto y agradecimiento: “Cuando uno va empezando, que alguien te tienda la mano de esa manera es importante, porque no necesariamente todos tienen esa actitud de apertura con los nuevos” (J.C. Núñez, comunicación personal, 24 de junio de 2019).

Durante las coberturas, toparse con el fotoperiodista significaba escuchar anécdotas, recibir alguna broma o algún consejo. En un coche Falcon color tinto, como describe Laura Gutiérrez, y con su cabeza apenas asomándose por lo bajito que era, se reconocía al señor Zenteno, quien en varias ocasiones daba ride a sus colegas (L. Gutiérrez, comunicación personal, 21 de junio de 2019). Juan Carlos Núñez, quien coincidió con él en los trayectos entre un evento y otro, recuerda las pláticas que este compartía de su trabajo como fotógrafo.

Sus años como reportero gráfico no solo le valieron para conocer a periodistas de su generación y de generaciones posteriores, sino que políticos, empresarios y personajes públicos fueron captados por su lente. Cuando Guillermo Gómez Sustaita entrevistó a Ernesto Zenteno en 1996 con motivo de sus 50 años de trayectoria, este ya había visto trascurrir a 10 gobernadores de Jalisco, 19 alcaldes de Guadalajara y cuatro cardenales (Gómez Sustaita, 1996).

Esta experiencia llevaba a que algunas asignaciones fueran especialmente para él, dice Julio César Hernández, que recurría a Ernesto Zenteno cuando él era la única persona a la que le dejarían tomar fotos, porque ya lo conocían.

Cuando tomaba fotografías en las coberturas Zenteno era serio, trataba de explicarle a sus compañeros que había que fijarse en uno y otro para que todos pudieran trabajar, ya que para él cada momento era irrepetible y por eso su concentración absoluta era fundamental.

Fuera del trabajo era una persona a la que le gustaba bromear. Su llegada a la redacción del Ocho Columnas significaba entregar sus fotografías y, entre chistes y carrilla entre ellos, recuerda Alejandra Díaz, cuando lo ayudaba a descargar su material. Cuando ella le hacía alguna sugerencia y señalaba alguna fotografía que le gustaba más, este le decía “A ver, ¿quién la tomó?” “Usted”, respondía Alejandra. “¿Y quién sabe más?, preguntaba Zenteno. “Usted” era nuevamente la respuesta. “Ah, bueno pues usted decida”, terminaba ella, bromeando (A. Díaz, comunicación personal, 9 de abril de 2019).

“¿Algo más, Maestro?”, escuchaba Julio César Hernández decir al fotógrafo cuando este había acabado. Tras entregarle una serie de fotografías, no únicamente de los eventos que cubría sino con referencia a los temas
de los
que se hablaban en ruedas de prensa o en alguna de sus variadas asignaciones, Hernández tenía la confianza de tener la foto exacta para la nota. Siempre con la disposición de saber si algo más faltaba, Ernesto Zenteno “terminaba si tú le decías que no se ofrecía nada”.

El compromiso del reportero gráfico por cumplir una orden lo llevó a poner en peligro su vida en varias ocasiones. Golpizas, intentos de homicidio y amenazas (Gómez Sustaita, 1996) fueron algunos de los riesgos que se le presentaron. Recuerda Zenteno Ortega cuando su papá le contaba el día que quedó atrapado en una mina en Guachinango, Jalisco, junto con un doctor y otras tres personas, después de que la entrada se derrumbara. “El médico les decía que no se desesperaran, que tomaran poco aire para tener reserva, les decía que había gente afuera que sabía que estaban ahí y que iban a rescatarlos. Ya cuando mi papá vio una luz chiquitita, como si fuera un ventanal, le dio gusto poder salir”, cuenta.

Si Ernesto Zenteno seguía con su trabajo a pesar de estas circunstancias era porque para él había una satisfacción muy grande en dejar un registro de lo que estaba pasando, cuenta su hijo. Y así fue. Su trabajo como reportero gráfico fue reconocido en la edición 2008 del Premio Jalisco
de Periodismo, cuando este tenía poco más de 60 años de carrera periodística y se desempeñaba en el diario Ocho Columnas. La presea “Despertador Americano”, que se le otorgó por su amplia trayectoria “registrando imágenes de la historia contemporánea de Jalisco” (El Informador, 2018), fue un motivo de orgullo tanto para sus compañeros como para la casa editorial en la que trabajaba.

Tanto Alejandra Díaz como Mario Ávila fueron consultados sobre los merecimientos de los candidatos propuestos para ese reconocimiento: “No iba a dudar en decir todas las bondades del profesionalismo, la dedicación, la honorabilidad y lo cumplido que fue siempre el señor, trabajando en un medio de comunicación”, recuerda Ávila.

El fotoperiodista, siempre al pie del cañón, compartía su trabajo con sus hijos. Zenteno Ortega recuerda haber acompañado a su papá a las coberturas desde que tenía cinco años, la impresión por lo que su padre veía y capturaba en su acontecer diario dejó una admiración tan fuerte que hizo que tanto él como otros dos de sus hermanos continuaran con su legado y dedicaran su vida a la fotografía periodística.

Antes de que cerrara el periódico Ocho Columnas sus hijos le preguntaban por qué no se retiraba. La respuesta que recibían era la misma que le dio a Gómez Sustaita en 1996: “Lo que deseo es caer, cuando llegue el día, con la cámara en la mano”. Y así fue, Ernesto Zenteno salió del diario en el año 2011, poco antes de que este cerrara.

Después de más de 60 años como reportero gráfico, la enfermedad de Zenteno fue dejar de trabajar. Al dejar de estar tan activo, como acostumbraba, comenzó a sentirse desganado, dice su hijo, que aún recuerda las palabras del médico: “Su papá no tiene nada, tiene una depresión que le ha de haber llegado por el retiro de tantos años en un periódico”.

Casi al final de su vida empezó a perder la memoria, cada vez caminaba más despacio y hablaba menos. Antes de morir, cuando todavía estaba en sus cinco sentidos, su familia miraba cómo Zenteno los señalaba con dos dedos, como si estuviera haciendo el símbolo de “amor y paz”. Cuando uno de sus hijos le preguntó qué era lo que quería decir, el Maestro contestaba “siempre juntos”.

De la mano de Lupita, su esposa, a quien nunca dejó de mandarle besos, y junto con sus hijos Ernesto, Concepción, Ricardo, Eduardo, Fernando, Jesús y María Eugenia, Ernesto Zenteno murió el 21 de febrero de 2018, en familia y con la promesa de un “siempre juntos”.

Tras la muerte de su papá los contactos de los compañeros que alguna vez tuvo se perdieron; sin embargo, Ernesto Zenteno Ortega pudo comunicarle la noticia a José Luis Jiménez Castro, reportero y amigo suyo. En el velorio sus hijos quedaron impresionados: la gente no cabía en la funeraria.

Ernesto Zenteno Covarrubias no fue únicamente un fiel testigo de Guadalajara, cuyo paso por la ciudad quedó registrado en cada una de sus fotografías, sino que, además, fue una persona muy querida y un ser humano al que se le profesaba mucho respeto. Su amabilidad, ayuda y enseñanza serán recordadas por aquellos que lo conocieron y su trabajo, conservado en un archivo que atesora su familia, quedará como un legado para el fotoperiodismo.

Hay quienes no nacen para ser periodistas y a la primera oportunidad se cambian de bando, dice Mario Ávila, pero don Ernesto Zenteno no lo hizo: “Él sabía lo que se pagaba, sabía las condiciones de trabajo, sabía que las jornadas no son de ocho horas y a él no le importó trabajar 10, 12, 14 horas, teniendo 15, 20, 40 o 65 años, él trabajaba las jornadas al mismo ritmo”.

El que nace para periodista va a ser periodista toda la vida. Bastaba con ver a Ernesto Zenteno para reconocer que él traía el periodismo en la sangre. Con la vitalidad con la que capturaba cada momento encerraba a un veinteañero en sus sesenta y tantos años, y cada una de sus enseñanzas se seguirá asomando en la vida de aquellos que alguna vez lo llamaron con un “oiga, Maestro”.

 

Referencias

El Informador (2008, 12 de diciembre). Premian trabajos que denuncian injusticia e indolencia oficial. El Informador. Recuperado de https://www.informador.mx/Jalisco/Premian-trabajos-que-denuncian-injusticias-e-indolencia-oficial-20081212-0339.html

Gómez Sustaita, G. (1996). El privilegio de captar la historia. En 33 tapatíos y Guadalajara. Ciudad: Editorial.

 

[1] Jefe de información del diario Ocho Columnas de 1988 a 2010.